Me gustan los gloryhole - Relatos Eróticos

Me gustan los gloryhole

Mi mujer y yo somos una pareja normal, rodeamos la cuarentena pero nos mantenemos bien físicamente, yo mido 1,80 rubio de piel anglosajona delgado pero físicamente me mantengo en forma y mi mujer es algo mas baja que yo, 1,60 de estatura morena y piel oscura un cuerpo estupendo y apetecible sexualmente hablando con un par de estupendas tetas y un culo realmente apetecible (lo dejaré a vuestra imaginación), nuestra vida sexual es bastante placentera y activa vamos que nos va la marcha a partes iguales, aunque a veces solemos caer en la dichosa monotonía y siempre solemos buscar alternativas para no caer en ella. Sandra y yo Rober que así nos llamamos a veces a la hora de hacerlo nos contamos nuestras fantasías y las solemos llevar a cabo con nuestra imaginación, por Internet solemos leer relatos que nos pone súper cachondos elegimos uno cada uno y lo leemos cada uno en una habitación después como al acabar de leerlos estamos a mil solemos follar como dos animales imaginándonos aquel relato el cual al acabar solemos contarnos, nos van mucho los de fantasías, tríos, incluso el de bisexuales. Solemos comprar artículos eróticos por Internet para los dos aunque para ella hay mucha mas variedad, algo fetiche para mi es la lencería íntima y a ella son los juguetes y los productos de jugar en pareja. Una vez quise comprarle un conjunto de látex se los que llevan cremallera por detrás, muchas veces ponen un vídeo explicando su uso y los distintos juegos que se pueden realizar, eso me ...

... lo imaginé puesto en ella y me puse como una moto, así que decidí comprarlo se lo enseñé le gustó la idea pero había un problema habían varias tallas y no sabíamos cual elegir, como había en stock nos acercamos a la tienda para probarlo estaba rebajado así que era buena oportunidad, pensábamos que era la típica tienda erótica pero no era así era mas bien el típico sex shop con una amplia variedad de actividades a parte de la tienda al entrar vimos que había un pasillo largo hasta llegar a la tienda y a los costados unas cabinas individuales donde se echan monedas y poder ver porno a la vez que puedes satisfacerte, nunca había estado en un sitio así y mi mujer se sorprendió llegamos hasta la tienda y nos atendió una chica. Dependienta (D) -Buenas tardes en que podría ayudaros? Yo -Hemos visto por Internet que tenéis este modelo ( se lo enseñé por el móvil) y quisiera probárselo mi mujer pero no tenemos idea de que talla le puede ir bien. D -Si claro ahora mismo voy a buscarlo. A todo esto mientras nos atendía veía a mi mujer viendo los escaparates con curiosidad viendo la amplía gama que había en juguetes. Sandra (S) -Has visto Rober cuantas cosas que hay aquí es muy grande esta tienda, mira que cantidad de dildos. Yo -Si te gusta alguno no te cortes jajaja. S - Voy a echar un vistazo y si me gusta alguno lo pillamos. La dependienta que estaba tardando un rato vino al momento. D -Ya estoy aquí, mirar este creo que será tu talla tenemos un probador al fondo. Mi mujer dejó de ...