Mi hermana, mi amiga, mi novia, mi amante
Fecha: 05/11/2018,
Categorías:
Lesbianas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Desde siempre mi hermana y yo hemos mantenido una relación muy fuerte, más allá de cualquier convencionalismo. Hemos crecido en una familia de clase media-alta y nuestra educación aunque religiosa y fuertemente arraigada nos han impedido reforzar nuestro cariño y el amor que profesamos la una por la otra.Mi hermana y yo somos de edades muy cercanas, ella un par de años mayor que yo, y somos muy parecidas físicamente.Todo lo que voy a relatar a continuación es totalmente verdad y ha ocurrido y sigue ocurriendo en la actualidad.Desde que tengo uso de razón mi hermana y yo hemos mantenido una estrecha amistad en todos los aspectos, nos hemos contado todos y cada uno de nuestros secretos y hemos mantenido muchas de las cosas que nos han ocurrido en nuestra intimidad. Nuestra relación se basa en el amor mutuo que nos tenemos y en lo mucho que nos gusta el sexo.Desde hace años, nos hemos bañado juntas en la bañera, hasta que en una edad algo más madura, nuestros padres no consideraban que debíamos seguir haciéndolo, por lo que durante una temporada dejamos de hacerlo y cada una se duchaba por su parte.Pero pronto ocurrió algo que me sorprendió y que cambio por completo la relación entre mi hermana y yo. Yo tenía 17 años y ella 18.Un día llegaba yo del gimnasio después del colegio y mi hermana estaba ya en casa, mis padres aún no habían vuelto de trabajar, ya que lo hacían tarde, y de la puerta me fui directamente a la ducha. Entre en el baño, cerré la puerta sin cerrojo como ...
... solía hacer y me desnudé. Me metí en la ducha y empecé a enjabonarme. De pronto y sin darme cuenta, mi hermana entró totalmente desnuda en el baño y en la ducha, y diciéndome "hola hermanita…" y comenzó a enjabonarme. Aquello me sorprendió pero me gusto, me gusto tanto que empecé yo a enjabonarla a ella y viceversa. Así nos duchamos de nuevo juntas, después de algunos años sin hacerlo.Después de aclararnos, nos secamos y nos pusimos los albornoces y nos fuimos cada una a nuestros cuartos, pero antes de que me quitara el albornoz, apareció mi hermana en mi cuarto con únicamente una braguita y un sujetador puesto, y me dijo: "Te echaba de menos…, quería volver a recordar viejos tiempos, ¿te ha importado? ", y le dije que no, que yo también la echaba de menos y que me había gustado mucho la sorpresa.Ella dijo que se alegraba y que esperaba que pudiéramos seguir haciéndolo cuando nuestros padres no estuvieran, a lo que respondí que me parecía muy bien.Entonces ella se fue a su cuarto y yo me vestí preparándome para la cena.Durante el resto del tiempo no pasó nada, cenamos tranquilamente, vimos un rato la tele y luego nos despedimos hasta el día siguiente.Durante algunos meses más, seguimos duchándonos juntas, y lo hacíamos antes de que nuestros padres volvieran de trabajar, así que nosotros mantuvimos nuestro secreto y ellos no se enteraron de nada.Pero volvió a pasar algo que dio un giro radical a nuestra relación de hermanas. El día que yo cumplía 18 años, por la noche, después de ...