Mi sumisa traía regalo (IV) - Relatos Eróticos

Mi sumisa traía regalo (IV)

... evitar, pero…

-Sin peros PUTA, o prefieres que lo dejemos aquí.

Al ver con la seriedad con lo que lo dije, a MI PERRA y al cornudo les cambio la cara.

-No SEÑOR, sabe que puede hacer lo que desee, tanto con nosotros como con ellos.

Ni conteste, solo vi la cara de alivio de MI PERRA, y una sonrisa en el cornudo.

Entre a la cocina, y alli estaban las dos, Olga con una copa de vino y Andrea liada con el arroz.

- ¿Cómo va el arroz?

-Bien Raul, en quince minutos estamos comiendo.

-Está bien, pero quiero que a partir de ahora dejes de tutearme, tú eres la sirvienta, y yo el señor.

Lo dije con firmeza y serio.

A Olga le salió una sonrisa, pero Andrea se puso nerviosa, y de todos los colores, pero las dos copas de vino y la que tenía en la encimera, ya la tenían achispada, pero tartamudeando.

-Perdón SEÑOR, no sabía.

-Pues ya lo sabes.

Me acerque a Olga.

Como era una isla y ella estaba frente a Andrea.

-Las manos en la encimera y el culo fuera.

A Andrea se le cayó el cucharon al suelo, pero Olga sin decir nada, sin inmutarse, pero con una cara de PERRA salida se limitó a obedecer.

-Tú sigue con el arroz.

Le subí el vestido y bajándome los pantalones y sin resistencia, porque las bragas habían quedado en su cama, la penetré de golpe.

-Uf, estas chorreando, pero que PUTA eres.

-Uf, si, la más PUTA, pero solo su PUTA, SEÑOR.

-Si consigues que me corra antes de que la sirvienta (esto lo remarque mirándola a los ojos), ...

... termine de preparar el arroz, te premiare.

Andrea estaba de todos los colores, no dejaba de mover el arroz, pero no podía apartar la vista de cómo me estaba follando a la hermana de su jefa, delante de ella.

-Uf, ¿me puedo correr?, uf, estoy salida, me tiene salida SEÑOR.

-No PUTA, aguanta, uf, quiero hacerlo a la vez, uf, sigue, sigue moviendo ese culito uf.

- ¿Le queda mucho al arroz?

-No SEÑOR.

Pero no dejaba de mirarnos…

- ¿Te gusta lo que ves?, y no mientas, que tus pezones van a atravesar la camiseta.

-Uf, es verdad SEÑOR, se ha calentado más que el arroz ag, no voy a aguantar

-Me corro uf, cada vez me gusta más tu coño PUTA, ag.

Me vacié dentro de Olga, mientras esta se estaba corriendo y gritando de tal forma que sabíamos que fuera se estaban dando cuenta.

-Límpiame.

No hizo falta más, poniéndose de rodillas se metió mi polla en la boca y la dejo limpia.

- ¿Me he ganado el premio SEÑOR?

-Si PUTA, luego te lo daré.

-Me subí los pantalones y antes de salir…

-Vámonos que aquí hace calor, ahora vendrá Victoria a ayudarte a poner la mesa.

Salimos los dos juntos, y al entrar los tres nos miraban, pero no dijeron nada, aunque la cara de las dos era todo un poema, mientras que la del cornudo era de risa.

-Ve a ayudarla a poner la mesa.

-SEÑOR, entre lo de esta mañana y lo de ahora, tengo el coño pegajoso y si no llega a ser por las medias, tendría las piernas igual.

Yo lo que quería era saber si Andrea le decía algo a ...