Disfrutando el culo de mi sobrina
Fecha: 28/07/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: MikeFed, Fuente: CuentoRelatos
Mi hermana de vino a pasar uno días en nuestra casa de veraneo, en la costa de Uruguay. No vino sola, vino con Jessy, su hija de 20 años, un pendeja que está muy fuerte. Castaño claro, buenas tetas y un culo, simplemente espectacular, parado, bien formado.
Todo comenzó ni bien llegaron. Jessy se paseaba por la casa en una bikini infernal, mostrando todos sus atributos. Con Katia, mi mujer tenemos una relación abierta, a ella le gustan las mujeres y a mí, también. Muchas veces hemos hecho trio con mujeres, y solo un par de veces con hombres, pero a ella no le agradan. La segunda noche, luego de regresar de cenar en un restaurante, y con la excusa que era una noche espectacular, los cuatro nos quedamos en el parque disfrutando un champagne.
-Wow, esto que sí pega. Dijo mi cuñada, no habituada a tomar champagne.
-Sip, me pone en tono. Dijo Katia guiñándole un ojo a mi hermana.
-Que suerte que tenes donde rascarte… No todas podemos decir lo mismo. Dijo Mirna, mi hermana.
-Ya tendrás tu tiempo, dijo mi mujer.
Un rato después, nos fuimos a acostar y con Katia nos cogimos con todo y como habitualmente ocurre, ella no se cuidó en el volumen de sus gemidos y sus gritos.
Cuando estábamos desayunando Jessy y Mirna la cargaban, por los gritos de placer. Jessy me miraba sin disimulo, se mordía los labios. Un rato después fuimos a la playa. Cuando me metí al mar, Jessy me siguió. Estábamos cerca, y ella no dejaba de seducirme.
-La hiciste mierda anoche a mi tía. ...
... Dijo Jessy.
-Digamos que disfrutamos mucho los dos. Dije.
-No jodas, sus gritos de placer eran tremendos.
-Porque yo no soy de gritar cuando gozo. Dije
-Entonces debes ser un hijo de puta en la cama. Dijo ella.
-Digamos que soy un hijo de puta. Punto.
-¿Te animaste con una pendeja? A tus cuarenta, mucho aguante no debes tener…
-Me anime, lo del aguante, hay que ver tus parámetros.
-¿Vos me cogerías? Me dijo mirándome a los ojos.
-Por supuesto, pero solo si me dejas hacerte el culo. Tenes un culo increíble.
-Solo una vez lo entregué…
Dijo eso y se acercó hasta quedar pegados. Sin que yo lo espere, aprovechando la distancia que nos separaba de su madre y mi esposa, puso mi mano en mi malla para tocarme la pija que ya estaba parándose.
-Aunque con eso… me daría miedo. Dijo.
-Todo o nada. Esa es mi condición. Dije mirándola a los ojos.
-Hijo de puta. En serio me queres romper el culo.
-Si, no lo dudes. Y no se te ocurra jugar conmigo, porque de todas formas te voy a coger ese culo.
No dijo nada, y volvió a tomar sol. Yo me quedé un rato más en el agua y vino mi mujer.
-Está caliente con vos. Se nota a la distancia. Dijo Katia.
-Eso parece. Y que no joda, porque le rompo el culo. Dije.
-Vos te la coges y yo me tranzo a tu hermana desgraciado.
-Por mi… dale tranquila. Anda necesitada de sexo parece.
Salimos del agua y al mediodía fuimos a almorzar a la casa. Las tres estaban en bikini y no podía elegir una, las tres son ...