Mi novia pago la apuesta sin darse cuenta - Relatos Eróticos

Mi novia pago la apuesta sin darse cuenta

... dirigiendo su culo hacia mí de donde goteó una gran cantidad de semen blanco de su vagina.
-	Tú también te corriste dentro de la mía
-	Pero ese no era el trato cabrón
-	Ni avisaste, sabias lo que hacías y ni preguntaste, aparte… que vas a hacer ahora
Una vez más tenía razón, no podía hacer nada. La vagina de Pau ya estaba inundada de su semen y no había marcha atrás. 
-	Tú te aseguras de darle la pastilla
-	¿Y ahora?
-	Déjame regreso todo.
Paulina desnuda, chorreando de semen, volvió a ir a la cama a dormir. Después, le susurro a cada una de nuevo y aun dormidas, empezaron a tomar su ropa y a vestirse. Poco a poco la escena volvió a ser la que hacia un tiempo estábamos los cuatro, vestidos, esperando el truco de magia de Román. 
Sentadas en la mesa, Román movía las manos rápido y preguntándole a Pau la carta que había elegido termino su acto con una Quina de picas negra y la sonrisa de mi novia incrédula de cómo había adivinado su carta sin tener la más mínima idea de que dentro de ella estaba la corrida del mago. 
De regreso a casa Pau estaba más cariñosa conmigo que de ...

... costumbre.
Llegamos a su casa y me invito a pasar a su cuarto, y en cuanto entramos me empezó a comer la boca a besos. Supuse que la había dejado muy caliente y hasta después de un rato recordé que hacía apenas unas horas la verga de mi compañero estaba dentro de la boca de Pau. Me la chupó como desesperada y gracias a eso no batalle en tener una erección de nuevo. Después de la mamada, sin preguntarme nada y con cara de lujuria se puso encima de mí y empezó a introducirse mi verga dentro de su vagina. Se sentía muy mojada y chiclosa seguramente por el semen previo. 
Eyaculé dentro de ella en poco tiempo, acordándome de lo que había pasado y siendo la coartada perfecta para convencerla de tomar la pastilla del día siguiente. 
Esa noche no dormí
Al día siguiente volví al trabajo, Román no me trataba diferente a pesar de lo vivido y poco a poco todo volvió a la normalidad.
Tiempo después platicamos de lo sucedido y la verdad es que a ambos nos excito mucho. 
El ya tenía otra novia y me propuso volver a intentarlo, que más podíamos perder
Pero esa es otra historia
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