EL NIETO DEL GENERAL 6 - Relatos Eróticos

EL NIETO DEL GENERAL 6

Amadito se la había pasado jugando toda la mañana ya había llegado la mayor parte de la familia junto con sus esposas la casa se había llenado en un par de horas, Después de que terminamos con los asuntos de los ranchos, mis hermanos, junto con mi padre nos dedicamos a hacer la carne y bebimos algunas cervezas, todos se habían ya retirado al interior de la casa el dia había resultado divertido. Mi padre dispuso de las habitaciones y termino dejando todas las habitaciones del segundo piso de la casa a las esposas de mis hermanos y los niños y nosotros nos quedaríamos en la que solía ser la casita del capataz, que ahora estaba desocupada y justo del otro lado donde habíamos hecho la fogata. Eran cerca de la media noche y mi padre se despidió de nosotros así que solo quedamos mis dos hermanos mayores, Jaime cercano a cumplir 40 y Eduardo de 36, ambos casados y yo. Seguimos platicando y de repente vi a Amadito que venía envuelto en un cobertor, caminando desde la casa grande. -Que paso pequeño no te dejaban dormir? -No me puedo dormir se escucha el ruido de un tractor. Los tres soltamos una carcajada al reconocer que hablaba de nuestro padre. Jaime le respondió -Es verdad así suena cuando ronca el viejo Y extendió su brazo para indicarle a Amadito que se acercara para abrazarlo, lo sentó en sus piernas y acercándolo a su pecho, me volteo a ver y me dijo. -Carnal que suerte tienes que lindo este nene y según me dice el Lalo ya está bien acostumbradito. -Ya se hermano, la verdad ...

... fue una sorpresa y no sabes que alegrías me da. Mi hermano metió su mano grande entre la cobija y el cuerpo del nene y lo comenzó a acariciar, sintió su piel tersa y noto que debajo de la cobija Amadito estaba completamente desnudo, solo se había puesto sus tenis y había salido asi de la casa. Paso sus dedos por su cuellito y giro su carita hacia donde estaban sus dos hermanos, acerco su boca de hombre al cuello del nene y consu barba comenzó a darle besos en el cuello, Amadito cerro los ojitos y gimió. Sergio y Lalo sintieron al ver que el nene estaba gozando como sus vergas se ponían duras de inmediato y vieron como su hermano mayor ahora tenía una de las manos del nene de apenas 5 años sobre el bulto de su pantalón, que hacia una carpa descomunal parecía que quería explotar, dejo el pechito del pequeñito descubierto y comenzó a besar su espaldita, mientras acariciaba su pechito y barriguita con su otra mano. Estiro las piernas para permitir que Amadito pudiera desabrochar su cinturón y después el botón de su pantalón, la presión que su verga dura hacía, hizo que el cierre comenzara a ceder de forma rápida y salió su verga de casi 21 cm si bien no era mas grande que la de su hermano Sergio si era mucho más gruesa como la de Lalo y mucho más parecida a la del padre de los 3. -Tio Jaime está bien dura- Le dijo Amadito mientras lo veía a los ojos con una sonrisa inocente de nene -Si pequeñito asi se puso por el gusto de que estas aquí Amadito miro a Sergio su ahora papi y le ...