Partida de Roscas en algún punto de la ciudad - Relatos Eróticos

Partida de Roscas en algún punto de la ciudad

Como ya era habitual el encontrarme con nuestro selecto grupo de amistades en estas fechas llegamos al lugar acordado.
Estaba yo en algún punto de la ciudad esperando a los demás compañeros.
Araceli envió mensaje diciendo que iba a llegar un poco tarde, era de todos sabido el motivo.
Gio estaba llegando acompañada de Mena, desde la última vez que nos reunimos como que se cogieron mucho cariño.
Eso aparentemente no importaba mucho, pero uno de los acuerdos que tuvimos antes de iniciar con nuestro círculo íntimo fue no formalizar nada con nadie.
Eso causaría muchos muchos conflictos. Y lo platicamos mucho antes de atrevernos a esto.
Cesar llegó y casi enseguida después llego Araceli.
Después de una platica muy amena los demás que estaban por llegar se disculparon.
Aun así decidimos celebrar el día de reyes al igual que todas las fechas que eran motivo de celebrar.
en resumidas cuentas cualquier pretexto era bueno para que todos pusiéramos una excusa para salir de nuestras casas y la rutina tediosa del trabajo y la familia.
Para disfrutar del sexo en todas las formas posibles.
Como Araceli llegaba por estas fechas de visita a la zona sur de Tamaulipas no podíamos perder tiempo.
Nos dirigimos esta vez a la casa que antes habitaba con su familia. Y que ahora estaba en venta, pero al parecer no urgía mucho venderla.
Ya que servía para reunirnos cada que ella venía a la ciudad, además era buen pretexto para seguir viéndonos.

De inmediato Gio empezó con arrumacos ...

... para Cesar y Mena al mismo tiempo.
Araceli muy excitada se abalanzó a mi y empezamos el jugueteo también.
Cuando menso la pensamos ya estábamos todos desnudos.
Las dos hembras se dedicaron a chuparnos la verga durante un buen rato.
Luego les devolvimos el favor a ellas.
Sobre la alfombra de la sala se acostaron abriendo las piernas.
Yo le lengüetee el clítoris a Gio mientras ella le seguía succionando el miembro a Mena.
Cesar le hizo los honores al clítoris de Araceli que no tardó en mojarse toda en un orgasmo.
Las hermosas nalgas de Gio y Araceli se dejaron ver temblorosas por la excitación y dispuestas a ser atendidas a través de sus panochas húmedas.
Mientras Mena penetró a Araceli estando ella en cuatro, ella le chupaba la verga a Cesar.
Yo antes de penetrar a Gio le metí la legua en su orificio anal. La hice gritar de placer cuando se resbaló mi verga entre los pliegues vaginales.
Los gemidos de nuestras hermosas y calientes hembras se sincronizaban como si fuera un erótico concierto.
Todos penetramos las jugosas roscas que nos estabámos comiendo esa mañana de seis de enero.
La rosca de Araceli era la más solicitada ya que era la visitante.
Gio un tanto celosa tuvo que esperar a ser atendida.
-andas con todo Manuelito!!!..--
dijo gimiendo Araceli cada que clavaba mi estaca en su húmeda y caliente cueva!!
La pasamos muy bien esa mañana.
Tuvimos que salir casi corriendo al ver el reloj ya que las obligaciones de trabajo y familiares y dadas ese día festivo ...