Después de mi primera vez. - Relatos Eróticos

Después de mi primera vez.

... solo llevaba un corpiño corto de color blanco que resaltaba con el tono moreno de su bronceada piel y que enmarcaba sus pechos, el corpiño le alzaba el pecho y al no llevar copas le dejaba a la vista sus gruesas y preciosas tetas, con sus gruesos pezones del tamaño de un garbanzo y sus oscuras aureolas, el corpiño hacia juego con el tanga blanco que llevaba, también de color blanco era de esas bragas de lencería de encaje que lleva una abertura en la zona central desde la vagina hasta las nalgas, de esos tangas que al abrir las piernas deja accesible el sexo de quien las lleva, me di cuenta rápidamente nada más verla pues se habia abierto de piernas como un compas y del centro de la abertura de su tanga era visible su vagina, un precioso y depilado coño de color un poco mas oscuro que su piel, con unos abultados labios vaginales entreabiertos, coronada por un sonrosado clítoris grueso como una haba, al estar sentada en el borde de la cama y tanto sentada en esa posición también se le veía el ano, del mismo tono que su vagina, resplandeciendo de los flujos vaginales que  de su coño salían dejando ver claramente lo caliente que ella estaba, todo ello rematado con un par de medias blancas que contrastaba fuertemente con sus zapatos de tacón de un fuerte color rojo.

Me había quedado pasmados con la boca abierta contemplándola, ante una visión tan sensual como la que nos ofrecía ante nuestros ojos hasta que nos dijo "os vais a quedar ahí toda la noche o va a venir a follarme ...

... alguno de vosotros...", dándome él una palmada en.la espalda me dijo "ve tú delante.. que eres el invitado", mirandome lujuriosamente ella me dijo, "desnudate y acércate", mientras daba los tres pasos que nos separaban me quitabá la chaqueta del pijama y me plantada delante de ella totalmente desnudo y con mi erecta polla apuntando al techo dura como una piedra.

Ella me dijo "acércate" mientras cogía una cinta de raso que tenía al lado suyo en la cama, después asio mi pene y dándole dos vueltas a la cinta, justo en la base de mi polla, me hizo un nudo con la cinta que me aprisionaba el pene y me dijo "así no te correrás sin mi permiso" después me dio una pastilla de color azul y me dijo "tragatela, esto te hara tener una buena erección durante toda la noche, que eyecules más  y podremos follar hasta que salga el sol", mientras me tomaba la pastilla hizo lo mismo con su pareja, le anudo la base de la polla y le dio otra  pastilla, yo estaba excitado y empalmado a tope, ella agarrandome de la cintura me pregunto"¿Par o impar", "par" dije yo, lo que la hizo sonreír y tal como estaba yo de pie con mi polla a la altura de su cara y mientras me atraía más hacia ella y mientras me agarraba del pene con una mano los testículos dijo "entonces nos ocuparemos primero de tus gruesas bolas", acto seguido se metió mi pene en la boca empezó a succionarla con avidez, yo empecé a moverme rápidamente de dentro afuera, en ese momento intervino él y me dijo "así no se hace...espera, voy a ...