Disfrutando del horario Pico en el metro - Relatos Eróticos

Disfrutando del horario Pico en el metro

Aproximadamente 8 am, el mejor deliciosamente lleno... como sucede de forma comun habemos muchos que parte buscamos ese ultimo vagón aunque casi todos lo niegan.

Sólo fue hasta que llegó el metro que me percaté de ese bello chico de aproximadamente 30 años, Rubio, fornido 190 de estatura que rápidamente se aproximó a la misma puerta que yo y por condiciones del mismo lleno del metro quedó a í os centímetros detrás mío credencial  (por fortuna), cerraron las puertas  y el movimiento forzó el acomodo de todos dentro, inmediatamente pude identificar el torso de su mano curiosa rozando mi trasero, no puedo negar que me sorprendí por la rapidez con la que esto sucedió m

No hice ningún  movimiento para que no se espantara y dejara de hacerlo, la verdad es que desde que descubrí lo mucho que me gusta que me manoseen aprovecho cualquier oportunidad para buscar disfrutar de una buena manoseada, al ver que no había ninguna reacción de rechazo tomo con rapidez confianza y antes de llegar a oa siguiente estación ya recorría con toda familiaridad y atrevimiento mis nalgas  cobijado por la complicidad del lleno absoluto, yo desde luego sintiéndome la más puta del mundo ya que realmente iba disfrutando de esa mano fuerte apretando mi trasero y recorriendo curiosa cada curva del mismo, fue entonces que sucedió algo que me hizo viajar a otra dimensión, hábilmente giró su cuerpo ligeramente cubriendo la vista hacia el resto del vagón con su mochila del lado izquierdo a la vez que  su ...

... mano derecha se metía hábilmente debajo de mi playera para tomarme por la cintura y suavemente pero de forma firme tomarme por la cintura y hacerme girar y quedar justo delante de su cuerpo rozando con mi trasero ese caramelo que se adivinaba enorme por encima de su ropa, adelantando su mano sobre mi abdomen ya logrando que mi puta interior buscará colocar ese delicioso paquete justo en medio de mis nalgas que para ese le gusten los tv de closet momento ya estaban sedientas de estar en otro lugar disfrutando ser penetradas, de manera firme jalo mi cuerpo hacia el suyo para apoyarme fuertemente su verga deliciosa en mi trasero de puta (su puta) su respiración fuerte y agitada chocaba contra mi cuello, mi nuca, se acercaba a mis orejas y retumbando ferozmente dentro de mi me hacía perder toda cordura, la gente al rededor fingia no darse cuenta y me o disfrutando cada segundo y cada centímetro de su cuerpo ardiente

Sacó su mano de mi vientre y mientras  con la mano derecha jalaba la pretina y cinturón  de mi pantalón con la otra mano se introducía hábilmente por debajo de mi ropa interior y buscando la división de mis nalgas, de sobra esta decir que yo sentía que volaba de placer y sólo atine a separar las piernas imaginando que estábamos solos y  me daría una riquísima follada...

No fue asi y sólo se limitó a acariciar hábilmente mi culito con sus dedos, me sentía tan puta como la mas puta del mundo y por mas que levanté mi culo para que me penetrara con sus dedos fuertes y ...