una dosis de juventud - Relatos Eróticos

una dosis de juventud

Me llamo Fernanda Tengo 23 años soy de Argentina vivo con mis padres y mi hermano menor de 16 mis medidas son 115 80 130 Me gusta mucho el sexo soy muy caliente Me fascina el sexo oral tanto practicarlo como que me lo hagan a mí mi hermano y yo nos llevamos muy bien aunque somos Polos opuestos yo con su edad ya andaba teniendo sexo y con noviecitos él la verdad es un traga libros Aunque mis amigas son recargarme mucho con él le dicen carne fresca joven Aunque lo dicen en modo de burla y no creo que ninguno se anime a coger con él Él y su grupito de amigos suelen hablar de mí porque los he escuchado empecé a notar hace un tiempo mi cajón de ropa interior revuelto y que mi hermano siempre después que yo me baño él entra al baño y tarda bastante Esto me llamó la atención en una de las noches con amigas le comenté esta situación todas ellas empezaron a reír y decirme que seguro mi hermano se masturbaba con mi ropa interior y cosas morbosas que me daban un poquito de asco la manera en que hablaban y no podía creerlo la puerta del baño de mi casa no no se puede llaviar así que un día luego de bañarme vi que él Entró al baño esperé unos instantes y entre de golpe al baño lo vi con sus pantalones abajo con mi tanga en su boca masturbándose una imagen muy morbosa mientras él lo hacía decía mi nombre no podía creer lo que estaba viendo y no podía creer que mi hermanito se masturbaba con mis tangas y que le gustaba sentir el dolor de mi concha y tampoco podía creer lo que él tenía ...

... entre sus manos un pene bastante grande para su edad de unos 18 cm he estado con nombres maduros con penes más pequeños que él rápidamente se me fui a mi cuarto Pensé en decirle a mis padres lo que pasaba pero primero iba a hablar con él así que esperé que él saliera del baño y le empecé a preguntar cosas y a decirle que era un asqueroso que como iba a hacer esas cosas que estaba mal el avergonzado me pidió por favor que no le dijera nada a mis padres pero era algo que él no podía controlar y que le gustaba mucho me confesó que había empezado a hacerlo desde los 14 y que le daba mucha pena y vergüenza pero no se podía controlar traté de entenderlo porque él para mí él era un niño todavía y que no pensaba bien lo que hacía pero le pedí por favor que no lo volviera a hacer que eso estaba muy mal y que no le iba a decir nada a mis padres pero que no lo vuelva a hacer él avergonzado se fue de mi cuarto yo me quedé allí pensando y recalculando toda esa situación toda la imagen que había visto la procesaba y aunque me daba un poquito de asco también me excitó un poco fue una sensación rara la verdad Pero no le tomé cuidado a la situación y como él me dijo que no lo volvería a hacer confía en él pasaron unos días y mi mamá me pidió que hiciera la ropa a lavar y cuando Estaba sacando la ropa y separándola estaba una tanga mía llena de semen y no sé por qué pero la llevé a mi boca y la pasé por mis labios y mi lengua y saboreé por primera vez el semen de mi hermano mezclado con el olor de ...