Locura en un campamento de trabajo - Relatos Eróticos

Locura en un campamento de trabajo

... había sido infiel a mi marido, pero ya eran más de dos meses sin sexo y creo que eso fue lo que me hacía flaquear, y de tanto acecho de ambos y en cada salida me ponía ropa muy sensual, y es que el otro sentido de una mujer hizo que empaque algo de ropa muy sexy y cada que salía con ellos me los ponía y los volvía locos, claro que del campamento tenia que salir con sacos largos para que no se note, pero mi físico hacía llamar la atención de quien me viera, todos los días qje salía con ellos pensaba y pensaba, si me encamo con uno de ellos o a los dos, claro que eso sería uno en cada salida, pero a ser algo difícil ya que salíamos los 3 juntos, pero todo dio un giro aquel sábado que salimos, y nos habíamos proyectado a salir a bailar y a beber ya que casi estaba acabando la obra y ya a mitad de semana nos teníamos que regresar, aquel sábado pensé en elegir en uno de los dos porque las ganas que tenía de sexo eran increíbles, aquella vez me puse un vestido negro con unas medias de malla y una de las tanguitas más sensuales que tengo, yo sentía la calentura y eso me hizo ir sin brasier, pensé en aquella noche con cual de ellos me iría porque ambos querían tenerme y eso me calentaba más, nos primero nos fuimos a comer pero yo aun no me quitaba aquel sacan que llevaba puesto pero desde que me vieron no paraban de alagarme, luego de comer algo nos fuimos a un bar bien privado donde habia como salitas y con luces muy bajas, pidieron una ronda de whisky 
Y empezamos a beber y a ...

... beber muchísimo pero cada uno no desaprovechaba la oportunidad de decirme lo que les plasca los tres estábamos ya muy tomados, cuando el primero en ir al baño fue Alex, Mario no perdió la oportunidad y empezó a seducirme diciéndome muchas cosas calientes, todo lo que deseaba hacerme, y puso su mano en mi pierna y mientras me hablaba se acercaba a mi boca y no quitaba la mirada de mi escote, la calentura empezó a sofocarme me quite el saco y los piropos de Mario aumentaban más y más, no me resistí y deje que me besara, sus manos no solo tocaban mis piernas si no que con si otra mano empezó a tocarme mis senos, nos besabamos con tal pasión que quiso meter su mano dentro de mi vestido y así poder agarrar mis senos, todo paso en cuamestion de pocos minutos, pero lo detuve porque si bien era jn lugar privado no dejaba de ser un sitio público, le pedí que delante de Alex no vuelva a hacerlo, para pasarla bien ambos y no sienta incómodo, seguimos bebiendo y charlando pero no dejaba de notar la mirada lujurioso de ambos y mas cjando alex me vio que no tenia ya el saco luesto, pero ahora fue Mario quien se fue al baño y Alex no perdio tiempo y al igual que Mario empezó a seducirme, el empezó a decirme que le daban ganas de follarme en ese momento, me decía que quería tirarme a la mesa y hacerme sexo oral, quería chuparme mis tetas y mientras me decía eso la calentura se estaba descorrolando se avalanzo y empezamos a besarnos su mano manoseaba mis nalgas los besos cada vez más eran más ...