1. La evolucion de Ana (2)


    Fecha: 25/11/2018, Categorías: Hetero Autor: vladi, Fuente: CuentoRelatos

    ... puntita y luego volverla a meter, pero no muy deprisa. A mí me gusta hacer todo lo que le guste a mi pareja, pero es importante que me demuestre que goza con jadeos, suspiros y gritos.
    
    Con la conversación y todo lo demás ni que decir tiene que teníamos ambos una estupenda erección así que decidí animar la fiesta y le dije a Jacinto que me apetecía bailar un poco con la música que yo había traído así que nos pusimos de pie y nos enlazamos bien apretados. Como ya os he dicho que la boca de Jacinto me llegaba a las tetas de manera que antes de acabar la primera pieza me había desabrochado la camisa, me había quitado el sostén y me estaba chupando los pechos y lamiéndome los pezones.
    
    Mientras tanto yo le metía el muslo entre sus piernas de manera que notaba bien la dureza de su pene que me restregaba con ganas.
    
    Empezamos a pasar a mayores sobre todo sabiendo ya lo que nos gustaba hacer y que nos hicieran, Jacinto me dijo que nunca había sentido una erección como la mía, dura como un palo y era admirable el tiempo que la mantenía tiesa. Así empezamos a meternos la mano por debajo de los tangas acariciándonos el pene hasta que mi chico me dijo:
    
    “Anita ya no aguanto más necesito terminar o voy a reventar”
    
    “Como quieras cariño, yo también estoy que me salgo y mi culito está deseando recibirte además te deseo tanto que quiero sentirte a tope y notar como se derrama tu leche dentro de mi así que házmelo sin condón si así lo quieres”
    
    Yo me quité el tanga y me puse a ...
    ... lo perrito, pero y él me dijo que le gustaría hacerlo de frente, para podernos besar y vernos la cara como Jacinto la tiene bastante larga aunque no muy gruesa creí que sería posible así que me lubriqué y le lubriqué a él, puse un cojín debajo de los riñones con lo que mi ano quedaba bien alto, levanté las piernas abrazándole con las rodillas a la altura de la cintura y fue capaz de metérmela casi toda y hacer los vaivenes como yo le había dicho que me gustaba. Fue mi primera experiencia de echar un polvo de frente y era divino vernos la cara de placer, besarnos y tener nuestras lenguas abrazadas, notar los jadeos y suspiros y ver la cara de placer sobre todo cuando se corrió que fue bien abundante. Cuando se le salió me dijo que a él nunca le había penetrado una polla tan dura como la que yo tenía así que con su propio semen le lubriqué y le hice una penetración a tope que me duró bien poco porque me corrí enseguida.
    
    Y así pasamos la tarde; a mí se me ocurrió que dado que me gusta que me sensibilicen las nalgas con azotes y luego me restrieguen el pene si no había algo adecuado, buscamos y encontramos una fusta de arrear a los caballos con la que Jacinto me dio mi merecido dejándome el culo bien colorado, pero sin darme demasiado fuerte para evitar moraduras ya que (esto no lo dije) el sábado noche tenia cita con mi novio. Una vez bien sensibilizado, yo vestido de putón y Jacinto en pelotas salimos a perseguirnos por entre las balas de paja naturalmente me alcanzó y allí ...