Experiencia fantástica en Pachuca - Relatos Eróticos

Experiencia fantástica en Pachuca

... tarde disfruté mucho el sexo con mi amigo. Pensar que a mi esposa se la estaban cogiendo mientras a mi también me estaban cogiendo bien rico, me puse bien caliente. Recuerdo que se la mamé una y otra vez, se la masajeé alternando con las manos y mi boca, hasta que se vino en mi boca y me tragué toda su lechita. Luego de unos minutos, me acomodó en la orilla de la cama y me la metió hasta dentro. Me bombeaba bien rico y yo le pedía más y más. Me volteó boca arriba, me levantó las piernas y se las puso al hombro y me siguió cogiendo. Después le pedí yo subirme a su sabrosa y exquisita verga, y volvió a terminar, esta vez dentro de mi colita. Siempre me dice que mi colita está bien apretada, que le gusta cogerme porque siente bien rico hacerlo conmigo.
Una vez que terminamos, pasamos a la regadera a bañarnos. Nos vestimos y nos fuimos a la sala de nuevo a esperar a que mi esposa saliera. Como 20 minutos después, salió mi esposa de la recámara. En seguida el amigo que la atendió. No supe cómo le fue a mi esposa, ni tiempo tuve de escuchar sus gritos, ya que yo estaba bien ensartado por la gruesa verga de mi amigo cogiendo a más no poder.
Volvimos a tomar unos tragos. Y nos despedimos de los amigos.
Ya en el auto, antes de arrancar, le pregunté cómo le fue. Me dijo que no esperaba ver y gozar una verga gigante como esa tarde. Que lo había disfrutado como nunca, aunque dice que al principio se asustó cuando se la vio, que llegó a pensar que no la aguantaría. Pero ya con el ...

... masaje y lo caliente que se puso, dice que le entró sin problema. Que se vino varias veces. 
Estando en la cama cogiendo esa noche, le pregunté como había sido.
Dice que le pidió que se desnudara y se pusiera boca abajo en la cama. Le comenzó a dar masaje en su espalda, por la cintura, en las piernas y cada que pasaba sus manos de las piernas a la cintura, le pasaba a tocar su vagina, y así se fue mojando. Y ella vio cómo la verga del amigo le iba creciendo cada vez más. Cuando ella ya estaba caliente, mi amigo la puso boca arriba. Le mamó su vagina chupando su clitoris, mientras ella gritaba de placer. Además, ella con su pie tocaba la verga del amigo, por eso se dio cuenta que la tenía enorme.
Cuando estaba bien exitada, el amigo se le fue encima y le acercó su enorme pene. Dice que sintió cómo le entró la cabeza y lentamente se la fue metiendo hasta tenerla toda adentro. Se la cogió como todo un macho mientras chupaba sus pechos. A mi esposa le encanta que le chupe sus pechos mientras me la estoy cogiendo. Dice que sintió que terminó más de una vez así.
Dice que después le pidió que se montara en él. Mi esposa obediente, antes de subirse al gran pene, no se aguantó las ganas de mamar esa rica vergota. Dice que no le alcanzaban sus dos manos para agarrar aquel miembro bien grande. Después de esas ricas mamadas, se montó y se miraba en el espejo cómo estaba siendo follada por ese hombre grandote. Le agarraba las nalgas para ayudarle a subir y bajar en esa vergota. Dice que se ...