Vecinos incestuosos - Relatos Eróticos

Vecinos incestuosos

Hola, como están ustedes.
Les voy a contar una historia real e interesante. Pasó esto hace unos veinte dias en la ciudad de Mar del Plata, Argentina. 
Por cuestiones laborales me radiqué en el centro de esta hermosa ciudad que es muy visitada en el verano y poco en el invierno. Vivo solo en un departamento de los edificios nuevos, que a diferencia de los antiguos tiene las paredes muy delgadas y por lo tanto, no son lo mejor en materia de privacidad. Dicho de otro modo, se suele escuchar todo lo que pasa en los departamentos cercanos, sobre todo los que son contiguos.
Se escuchan las discusiones o los gritos cuando la gente discute y también se escuchan los gritos cuando se reconcilian y se ponen a garchar. 
A tal punto que yo he optado por tener sexo fuera de casa para evitar las quejas de los vecinos. Sin embargo, un flaco pintón que no tiene mas de 26 o 27 años aprovecha su juventud y su facha cogiendo a lo lindo en el dpto de al lado, pegado al mio. El flaco -no pondré su nombre por respeto- tenia una novia. Pero la engañaba con compañeras de la oficina y profesionales. Al muchacho se ve que le gustaba mover el guiso de las damas y un dia la novia dejó de venir, pero el flaco mutiplicó las amigas que traia. Casi todas las noches, o la misma u otras mujeres de su edad o un poco mas o alguna trola contratada de la zona, se presentaba al bulin del amigo para darse amor toda la noche. Por supuesto, que desde mi habitación se escuchaban los gemidos del garche y las risas ...

... del jolgorio. No se escuchaba con precisión las cosas que se decían pero si se escuchaban los gemidos y los suspiros finales que probaban la eyaculación del flaco. A veces se percibía alguna que otra palabra pero en general se escuchaban los griterios. 
A mi me causaba gracia escuchar al muchacho coger con cuanta mina se le presentara porque también tuve esa edad hace veinte años atrás. Por lo tanto, soy de los que aplaudían la labor del flaco. 
Pero hete aqui que pasó algo bastante morboso que me calentó a mil y eso que hace rato ando con la libido baja. Un viernes a la noche volvía del trabajo y vi que el flaco entró al ascensor con una dama muy linda bastante mayor que él.
Si el rondará los 26 o 27 la mujer no llegaba a los 50. No creo que tuviera mas de 48. En realidad, era una mujer llamativa, casi exuberante. Rubia tirando a colorada, pelo largo y lacio, ojos marrones color miel. Buena pilcha, media cheta, perfume embriagador y una gran figura por donde se mire. Pude verla bien porque estuvimos en el hall esperando el ascensor y ellos subieron primero. De esa forma, la pude ver de costado mientras esperabamos el ascensor, de espaldas cuando entraron al ascensor y luego de frente, cuando se giró en el ascensor hacia la puerta. Allí contemplé que con su fina ropa ajustada (tanto la blusa como la pollera haciendo juego) le marcaban a la dama unas tetas impresionantes que andarían por no menos por los 100 de corpiño. Y el ojete era una delicia para los que gustan de las ...