Me gusto ser infiel - Relatos Eróticos

Me gusto ser infiel

Aun no cumplía en mes de casada cuando me pregunte qué motivos tiene una mujer para ser infiel pero para despejar esa duda tenía que experimentarlo en primera persona porque si preguntaba iba a recibir diversas respuestas eso se convirtió en una obsesión en mi mente luego la visualice como una fantasía imposible de realizar 
Fue pasando el tiempo (dos años ) y ya poco recordaba esa fantasía pero esta se hizo realidad en el momento que menos esperaba, estando de vacaciones con mi esposo en aquel lujoso hotel a orilla de la playa mi esposo recibe una llamada de la empresa le pidieron volver por un grave problema, decepcionada me dispuse a preparar las maletas ya que apenas teníamos dos días ahí pero él se adelanto me dijo que yo esperara ahí , el día que partió ya entrada la noche fui a caminar por ahí y llegue a un bar no soy experta en bebidas por lo que solicite una cuba, me encontraba sentada en la barra el lado de un hombre por cierto atractivo el cual entablo conversación conmigo, hubo una segunda copa ya para esto el bar se encontraba muy lleno y a mí se me ocurre decirle que ya había mucho ruido que lo mejor en disfrutar de la copa en un lugar tranquilo, cubierto el consumo me tomo de la mano y le seguí como mansa oveja aun sin sospechar en que iba a terminar 
Llegamos a una casa a orillas del mar donde sirvió otros tragos y tomo asiento a mi lado y como iba de short comencé a acariciar su pierna y él me imito, mi corta falda esteba muy arriba cuando coloco su mano ...

... en mi pierna fue como una descarga eléctrica, lentamente fue llevando su mano más arriba casi hasta tocar mi vagina yo estaba asiendo lo mismo casi tocaba su verga esas caricias se convirtieron en caliente cachondeo y ya no me pude contener abiertamente coloque la mano sobre la verga y la estuve acariciando el fue más audaz  metió sus dedos por entre mi tanga y comenzó a masturbarme metiendo los dedos dentro de mi vagina la cual ya se encontraba bastante mojada, era muy agradable sentir sus dedos adentro pero yo ya deseaba otra cosa, ya, ya no aguanto más mejor ya cógeme le dije, ya desnudos le di una buena mamada cosa que a mi esposo poco le hago pero esa verga se lo merecía un poco más grande y gruesa ( veinte centímetros contra diecisiete creo que si hay mucha diferencia ) y como si fuera una experta me coloque a gatas con la cara pegada a la cama para que mis nalgas quedaran mas levantadas , su verga se fue deslizando suavemente entraba y salía en ocasiones golpeaba mis nalgas con su verga y cuando por fin me la enterró por  completo yo ya bramaba y pedía más verga pero mi excitación fue mayor cuando comenzó a golpear  mis nalgas no eran caricias en verdad eran sonoras nalgadas durante el proceso estoy segura que por lo menos tuve cuatro orgasmos y al no estar protegido con un condón disfrute su venida dentro de mi
Pase la noche más feliz que había tenido hasta ese momento, la noche se hizo corta por lo cual solo pude disfrutar de su verga en siete ocasiones 
Ya no me ...