Primera vez BDSM reto semana anal - EROS - Relatos Eróticos

Primera vez BDSM reto semana anal - EROS

... culito y azotandome. Me ponía un vibrador en mi culo y le mandaba foto de todo a mi esposo. Así seguimos la segunda semana y para el otro fin de semana, me llevo al bar bdsm me cogí a varios tipos, yo arriba, en aparatos, cuando tenía las manos atadas a la espalda veo a mi esposo venir hacia mi, me desata, y me ata a una cosa con las manos y el cuello con un candado me mete su pene en la boca y me dice me haces falta, va y me coge mi culo muy duro. Salimos de ahí, y nos vamos para un motel y entre los dos me cogen de una manera, era mi primera vez siendo cogida analmente por dos hombre al estilo bdsm, yo gritaba de una manera que me taparon la boca. 
En esta experiencia descubrí que me gusta el placer más no el dolor, no me gustan que me pongan pinzas, ni otras cosas. 
Al terminar se los dije, he hicimos una cuerdo de ese tema, esas cosas no iban. El directivo reservo de nuevo la finca donde estuvimos y cogimos los tres muy rico los siguientes días, hasta el lunes que nos teníamos que devolver, me despertaba y me lo metia, tuvimos mucho sexo anal, yo me ponía un gel para refrescar para poder aguantar ese voltaje. 
El lunes nos llevó al aeropuerto, me cogió en el carro de una manera, mi esposo manejaba mientras él estaba dentro de mi culo y encima de él clavándomelo, en el aeropuerto me cogió en el baño antes de irme, y me dio las llaves de lo que me habia puesto, y me dijo es tuyo, úsalo con quien quieras, quiero volverte a ver y a tu culo rico. ...

... 
Quedamos en un año volvernos a ver porque el fuera de visita o nosotros fuéramos. 
Mi esposo de vez cuando le manda fotos de nuestras aventuras y de mi culo abierto y siendo penetrado. 
Y así fue como probé el bdsm. Hay cosas que me gustaron, cómo sentirme dominada, atada, inmovilizada, simplemente disfrutar y sentir, dejar libre tu imaginación. Y otra que no me gustaron y son un no para mí, no me gusta sentirme humillada, ni con pinzas ni el dolor, pero si sentirme dominada y hacer cosas diferentes. Para esta práctica llegar a acuerdo de que si y que no, es lo que a mí me ha funcionado. 
Esa semana casi no comí, fueron más cosas líquidas para poder tener ese nivel, de tener sexo anal todos los días, sin inseguridades. 
Después de esas dos semanas han intensas tuve que descansar del sexo anal intenso por un rato, si lo hacía con mi esposo pero con amor, para poder sanar y seguir con nuestras aventuras. 
Saque dos copias a las llaves de la gargantilla y demás elementos, le di una a mi esposo y le dije, cuando tú quieras soy tu sumisa sexual, soy tuya. 

Le mandé un mensaje cuando llegue del vuelvo 

"Debo confesar que me gustaron estas dos semanas de reto anal intenso BDSM. Nos vemos en un año mi AMO anal, ATT tu sumisa anal, bien abierta y adolorida". 

Si quieren saber en qué consiste la semana anal que hago con mi esposo y ya también involucramos al amigo de mi esposo, la pueden leer en relatos anales. Es una semana de solo sexo anal.