Un fin de semana inolvidable - Relatos Eróticos

Un fin de semana inolvidable

... miembro, mientras que mi tío miraba excitado lo que se desarrollaba frente a él.

Ahhh, ahhh, que bien la chupas decía esteban mientras me agarraba por los cabellos.

Con paso lento pero firme mi tío se acerco a nosotros, mi mano agarro su dura y latente pija para comenzar a masturbarlo.

Chúpame los huevos me dijo esteban.

Empuje decididamente su pija hacia atrás, para comenzar a lamer sus huevos.

Así, así gemía esteban con voz entre cortada.

Yo sabía que cada pija era diferente pero nunca había visto dos pijas al mismo tiempo, la de mi tío era gruesa con una cabeza rosada que le llegaba hasta el ombligo, cubierta con abundantes bellos color claro; mientras que la de esteban era delgada y larga, circuncidada, sin bellos ya que se los había afeitado, y sobrepasando su ombligo por una cabeza. con testículos grandes como los de mi tío.

Veni vamos a la pieza dijo mi tío mientras me tomaba de la mano.

Ya en la pieza mi tío se acostó sobre la cama boca arriba, mientras que yo me ponía de cuatro patas para seguir chupando su duro miembro.

Por detrás esteban comenzó a acariciar mi culito mientras lubricaba mi pequeño ano con un poco de manteca.

Lentamente se ubico detrás mío y tomándome por la cintura su pija se introdujo en mi.

Ahhh, ahh, comencé gemir con cada una de sus firmes pero suaves estocadas, que provocaban que me tragara la pija de mi tío mas y mas llegando hasta mi garganta.

Me toca a mi dijo mi tío.

Me dio vuelta dejándome boca ...

... arriba puso mis piernas sobre sus hombros mientras que de una sola estocada su miembro se escabullo dentro mío.

Ahhh, ayyy, comencé a gemir, a la vez que esteban se recostaba a mi lado dejando su pija a la altura de mi boca para que se la chupe.

Ahhh, mi amor voy a acabar dijo esteban mientras su tibio falo estallaba llenando mi boca con su tibia leche que comencé a tragar sin desperdiciar una sola gota.

Párate dijo m tío, obedecí en silencio, mi tío se acostó frente a esteban y juntando las dos pijas me dijo veni sentate.

Me puse de pie y lentamente me fui sentando sobre esas dos calientes pija.

Ayy, ayy, me duele, no entra dije mientras intentaba que mi ano se tragara los dos miembros.

No esta muy estrecho dijo mi tío.

Yo sé cómo hacerlo dijo esteban, me puso en cuatro patas, a la vez que con un pedazo de manteca comenzó a cubrir toda su mano.

Decime si te duele me dijo, y lentamente introdujo un dedo, dos, tres luego cuatro.

Ayyy, ayy, comencé a decir entre suspiros y placer.

Te duele pregunto mientras creo que me metía y sacaba toda la mano.

Noooo, dije casi a gritos.

Veni dijo mi tío y recostándose boca arriba me sentó sobre su pija.

Ahhh, cuando su pija se deslizo por mi agujerito, mientras mi tío me abrazaba fuertemente pegándome a su velludo cuerpo.

Esteban se puso detrás de mí a la vez que con una mano guiaba su fina pija hacia mi culito. Mientras que con lentas estocadas su miembro se fue abriendo pasó en mi ser.

Ayyyy, ayyy, ...