1. Por fin cumplí mi fantasía logre cogerme a mi sobrina 3


    Fecha: 07/08/2017, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... cuello, al tiempo que ella totalmente encendida exclamo, así, tiooo asiiii ahhhhh sígame cogiendo. Y yo bastante excitado de escucharla, le respondí ¡Caramba, Nicole, que rico coges¡ Era riquísimo ver a través del espejo, como mientras mi Nicole y yo cogíamos sus piernas se entrelazaban con las mías, y aún más excitante, ver como se compenetraban mi piel rugosa, morena y rasposa con la piel lisa, suave como seda y güerita de mi Nicole. Completamente extasiado seguí cogiéndome a mi Nicole, hasta que de pronto, puse mi mano izquierda encima de la de ella y las entrelazamos con ganas, como símbolo de que nuevamente la estaba haciendo mía; me clave a fondo en ella, no pude más y le mordí uno de sus hombros, en un gesto retorcido de placer, mi Nicole gimió a gritos ahhhhhh tiooooo me dueleeee ahhhhhhh yo no podía detenerme así que haciendo oídos sordos me la seguí cogiendo y mordiéndola. Yo la clavaba una y otra vez sin detenerme, la embestía con toda la fuerza de mi ser, apreté a mi sobrina por la cadera y le di una última estocada suprema, ya cuando por fin mi Nicole y yo llegamos al éxtasis, casi simultáneamente, ambos comenzamos a gemir, ahhhhhh mmmhhh. Y volteando a mirar nuevamente el espejo, se veía ...
    ... su cara y la mía, ambos gozábamos plenamente un par de orgasmos bien ganados, yo descargue todo, reprimiendo un grito, termine vaciándome por completo sobre el desnudo cuerpo de mi Nicole. Y sí, mi virilidad había vuelto, aun funcionaba como hombre, aunque si era un hecho que solo con mi Nicole podía desfogar toda mi pasión y mi potencia sexual, porque entrar en un cuerpo joven y hacerle el amor, revitaliza a cualquiera. Ya recuperando un poco el aliento y teniendo a mi Nicole recostada encima de mi brazo, ella me pregunto qué porque tan feliz y le dije, te lo voy a confesar pero no te vayas a reír de mí, en este tiempo trate de estar con otras mujeres, pero a ninguna pude hacerle el amor, con ninguna me encendí, solo contigo mi princesa, solo a ti puedo hacerte el amor, solo tú me excitas. Para mi sorpresa, ella no se burló, si no que se recostó encima de mí y sonriéndome me dijo, pues qué bueno tío, porque así no vas a irte con nadie, vas a ser solo mío; y poniendo sus manos sobre mi rostro comenzó a besarme en la boca tiernamente, lo bueno fue que la fiesta iba apara largo, y así mientras afuera los demás se embrutecían de licor, mi Nicole y yo nos quedamos en su habitación besándonos y acariciándonos. 
«12345»