LA HIJA DE MI CUÑADO (INOCENCIA PERDIDA) - Relatos Eróticos

LA HIJA DE MI CUÑADO (INOCENCIA PERDIDA)

... queria y era muy protector con ella……..entonces lo tome del cuello y apunto de reventarle la cara le dije que a ella ni se le ocurriera tocarla….. cuando estuve a punto de reventarlo me dijo que queria pero conmigo. ………..era marica el cabron………... el tenia 17 años y no le conocia novia alguna ni lo oi hablar de mujeres o algo parecido, creo que si lo sospechabamos con algunos en la casa pero no lo habiamos confirmado hasta ahora. Asi que accedi a cogermelo y lo cite en el almacen un domingo. Lo lleve a la bodega y cerrando el almacen le pegue que cogida, aunque me dijo que era su primera vez con un macho no tuve compasión y lo clave con tal rudeza que gritaba que parara pues le dolia pero yo mas duro le daba queriendo cobrarle asi la extorcionada. Cuando termine y me le derrame entre su culo reventado salio de un rincon de la bodega un amigo al que llame con anterioridad y le gustaban lo maricas y quien habia grabado con mi camara lo sucedido y luego cambiamos de papel ahora yo era el camarografo y mi amigo el macho culion y el marica seguia siendo el marica reventado. Cuando el maricon se dio cuenta de la presencia de mi amigo se cabrio y queria irse pero no lo permitimos pues yo no ...

... queria quedar mal con mi amigo, asi que le dijimos que escogiera: poner su culo de nuevo por las buenas o ponerlo por las malas después de la paliza que le dariamos y luego publicaríamos las fotografias de su culo follado en toda la ciudad. Asi que lo penso bien y mi amigo termino lo que yo habia empezado follandolo hasta el cansancio, al final creo que le gusto pues mi amigo fue mas cariñoso y lo besaba en la boca y masturbandolo hizo que se corriera.. lo amenace con publicar las fotos y videos si contaba lo que habia pasado entre Mariana y yo asi que guardo silencio. Mariana y yo seguiamos con lo nuestro; aunque no la desvirgue en ese entonces. Se que lo que hice estaba mal, pero pudieron mas mis instintos de macho que mi desencia. Aunque me excusaba a mi mismo diciendome que no habia sido yo quien inicio e incito para que sucedieran las cosas. Luego de un tiempo renuncie al trabajo y cambie de domicilio, aunque segui visitando la casa y la veia de ves en cuando, solo nos mirabamos o nos saludabamos de la mano y ocasionalmente un beso en la mejilla, sin que volviera a pasar algo. Hasta hace poco; antes de cumplir sus 14. pero esa es otra historia que tal ves contare en otra ocasión.