Soy la puta de mi yerno - Relatos Eróticos

Soy la puta de mi yerno

Por contar con las llaves de acceso de la casa de mi yerno me sentí con el derecho de ingresar sin pedir permiso o notificar llevándome una gran sorpresa
Me yerno se dirigía al baño completamente desnudo y quise llamarle la atención diciéndole que como se atrevía a mostrarse desnudo, sin que hiciera el mas mínimo intento por cubrirse me dijo, no recuerdo haberte invitado mejor dime tu qué haces aquí a esta hora, ya mi atención se encontraba centrada en su verga que se estaba poniendo dura, daba la impresión de que estaba disfrutando del momento porque orgulloso mostraba su verga ya bien dura moviéndose de arriba abajo ya no ponía atención a sus palabras y medio reaccione cuando coloco sus manos en mis hombros haciendo presión en ellos con la intención de que me inclinara y no me incline me arrodille y cuando coloco su verga en mis labios abrí la boca comenzando a mamarla, tenía siete años sin coger y a mi difunto pocas veces se la mame, con los ojos entre cerrados me la fui tragando hasta donde pude, su excitación ya era enorme y me pidió no me obligo a quitarme la ropa, vibrando de emoción quede desnuda y recuerdo que estas fueron sus palabras
Te voy a dar la mejor metida de verga de tu vida te la voy a meter hasta que ya tengas la panocha hinchada, yo obedecía como mansa oveja y así colocada a gatas poco a poco me fue metiendo la verga la que por ...

... cierto sentía enorme, como ya me encontraba muy mojada su verga se deslizaba con suavidad  aun así yo pujaba y gemía, ignoro el tiempo que transcurrió cuando mi cuerpo convulsiono a la llegada del más grandioso orgasmo que había tenido, con el difunto había tenido pero ninguno como ese y no mintió cuando me dijo que me iba a coger hasta que mi panocha se hinchara porque no mostraba señales de correrse yo por mi parte continuamente me convulsionaba con cada orgasmo hasta que por fin se corrió calculo que después de media hora y sin sacarme la verga espero a que de nuevo estuviera dura y reanudo sus embestidas claro ya habíamos cambiado de posición, posición que continuamente modificábamos, ya mis fluidos escurrían por las piernas producto de los innumerables orgasmos, no sé si solo a mi me sucedió pero conforme mas verga me daba más verga quería, cuando esa segunda metida de verga concluyo se tomo un respiro antes de cogerme por tercera vez 
En total me metió la verga en siete ocasiones  y cada una de ellas con mayor duración ya al final al tomar un baño me percate que en realidad mi panocha estaba inflamada y con dilataciones como pidiendo más verga 
La semana que mi hija estuvo ausente la aproveche para que mi yerno me llenara de verga ahora no se que pueda suceder en el futuro seré la amante que coge en el anonimato o me olvide y solo coja con su esposa