y Cuando conocí a mi suegra no pude evitar que me gustara mucho 11 - Relatos Eróticos

y Cuando conocí a mi suegra no pude evitar que me gustara mucho 11

Estábamos tomando desayuno y Ana dijo que ya había pasado un mes del nacimiento de nuestro hijo, así que le tocaba hoy su primer chequeo con el pediatra y mí suegra me dijo que ella iba acompañarla.

-! Me gustaría mucho ir con ustedes a su primer chequeo de mi hijo, pero hoy tengo una reunión con un cliente y estare regresando tarde a casa, me llamas cuando salgas del pediatra y cuentas que te dijo.. !
 
-! Quedate tranquilo Manolo, miralo a mí bebé está hermoso y sanito, pero igual te llamaré ..!

Había llegado el verano y era terrible usar corbata y saco, ropa que usaba cuando tenía una reunión importante  llegó el cliente y todo salió excelente  sé firmó el contrato y terminamos la  reunión mucho más temprano de lo que esperaba al recibir la llamada de la esposa del cliente. Y regresé a mí casa todo sudado con hambre, fuí a  la cocina y  abrí las ollas para saber que había cocinado la mamá de Ana.

Era mí plato preferido seco norteño con frejoles, me fuí primero a bañar y mientras caía el agua bien fría sobre mí refrescandome todo mi cuerpo, yo meditaba de la suerte que tenía en la vida al entregarme dos mujeres. Una era Ana mí esposa con quién ahora tenía mí hijo y la otra era mí suegra, pero las dos eran muy diferentes en la cama, Ana tenía una personalidad sexual tradicional, ella disfrutaba de nuestros encuentros íntimos pero sin demasiadas innovaciónes y muchas veces tuve algunas discusiones por querer sacarla de lo típico en el sexo. En cambio su madre era ...

... totalmente opuesto, su personalidad sexual era exploradora y curiosa, siempre ella estaba dispuesta a innovar y probar algo diferente en el sexo, pero estar casada tanto tiempo con un hombre  tradicional igual que su hija, hizo que tuviera que callar por mucho tiempo y guardar bajo siete llaves, todo ése libido que tenía en su cuerpo. 
 
Cuando termine de bañar y sabiendo que estaba solo en casa solo cubro mí cuerpo con una la toalla alrededor de la cintura y voy rumbo a la cocina,  cuando pasó por la puerta del cuarto de mi suegra y me pareció ver qué la puerta estaba entre abierta, entonces fuí a cerrarla y la encontré durmiendo completamente desnuda a la madre  de Ana sobre su cama. Y el verla así me abrió ahora el hambre de hombre, pero a la vez me pareció muy raro el verla en su cama, acaso no debería de estar junto a su hija y nieto.

-! Suegrita, suegrita despierte dónde está Ana y mí hijo..?

Y ella abrió los ojos y dijo que estaba con una amiga de su trabajo y luego sé fueron de compras, pero que ella no fue porque estaba cansada por el calor del día, así que le dije que iba a darle unos masajes para quitar todo el dolor de su cuerpo. Mis manos los pasaba por toda su espalda dándole al inicio leves masajes, luego lo hice por sus brazos y piernas fuí bajando mi mano le frotaba todo su culazo le separé las nalgas y tocaba su clítoris  abrió la boca dando algunos suaves gemidos de placer.

Momento que aprovecho colocando en sus labios mí verga bien hinchada y ...