Mi estudiante adolescente tetudita - Relatos Eróticos

Mi estudiante adolescente tetudita

Hola a todos los lectores de este sitio.
Mi nombre es Samuel, de 36 años, separado.  Profesor de preparatoria, doy el curso de matemáticas en varios niveles. En el año 2023, ya con clases presenciales 100%, tuve una estudiante que llamaré Karen, su papá es de este país, pero su madre es japonesa, ella mide 1.50 mt, es de talla pequeña, de 16 años, pero tiene unos senos increibles, que trata de de ocultar con ropa floja o suéteres de mayor talla que la debida.  Para resumir, ella siempre se mostró simpática conmigo y creo que hicimos click y nos juntábamos en los recesos a platicar y comer.  Además me visitaba en mi cubículo para que le retroalimente algunos temas de la clase que ella tenía duda.  Fue asi que en uno de esos días, nuestros rostros se pegaron mucho y la besé.  Luego eso se repitió toda la semana, solo besos de labios y lengüita. Muy rica su boquita, boquita de adolescente.  El viernes de esa semana, antes de irse me dijo que si quería llegar a su casa mañana, que sus papás se irían a una celebración con sus amigos, y que estaría solita en casa.  Ella antes que le contestara, extendió su mano y me dio un papelito, era la dirección de su casa y la hora en que se irían los papás.  Le dije -allí estaré-.

Al día siguiente, me di un baño, puse una pastilla de viagra en mi cartera, por si fuera necesario, casi nunca las uso, pero la llevaba por si me ponía nervioso, recuerden que era mi estudiante y menor de edad en este país.  Llegué unos quince minutos después ...

... de la hora señalada, ya estaba oscuro. Me cercioré que no hubiera tantas personas en la calle y fui directo a la puerta, toqué, y en pocos segundos Karen abrió y me pasó rápido adelante. Ella también echó una mirada a la calle, para ver quien estaba por allí.  Luego me saludó y nos abrazamos y besamos muy rico. Karen me llevó luego a la sala, a un cómodo sofá, me preguntó que quería tomar y me llevó una soda y unas galletitas, y dijo que las había hecho en la mañana.  Comenzamos a charlas de cosas triviales, ella estaba nerviosa, se notaba.  Me dijo que era la primera vez que traía a alguien a su casa.  Luego la tome en mis brazos y ahora si comenzamos ha darnos un agasajo con la boca, Le besé la boca, su cuello, los hombros, pues tenía una blusa de tirantes, que dejaba ver lo hermoso de sus senos.  No tardé en tocarlos sobre la blusa, en realidad eran increiblemente preciosos.  Al descansar un momento me dijo que odiaba sus senos, porque eran grandes.  Yo le dije que en realidad eran muy lindos y que con los años ella iba a agradecer tenerlos así.  Nos reímos.  Yo estaba muy caliente luego de muchos minutos besándonos ardientemente, fue cuando decidí quitarle la blusa y luego el sostén, quedaron ante mi sus preciosas bubis, las mamé por varios minutos, se las chupaba y lamia toda la circunferencia y le mamaba sus pezones, que se pusieron como tornillos, grandes y erguidos,  Karen comenzó a excitarse a gemir mucho.  La acosté en el sofá y le quité su faldita, quedó solo en ...