Me folle a la cerda que pasaba en mi casa - Relatos Eróticos

Me folle a la cerda que pasaba en mi casa

Bueno vengo a contarles de la primera vez que tuve sexo con una cerda.
Esto paso hace 5 años cuando tenía 19 años, pues resulta que yo vivo en un pueblo bastante desarrollado vivía con mi abuela y hermana, mi abuela tenía su casa bastante grande y varios cuartos en alquiler pues un día llega un hombre que mi abuela conocía quería que le alquilará el cuarto a lo que ella acepto así que esa misma noche se mudo el señor trayendo con el todas sus cosas entre ellas trajo a su cerda parida de tres cerditos, pues yo andaba muy caliente masturbándome y teniendo sexo con una mujer seguido a lo cual cuando no la veía seguido me ponía más caliente una tarde salí al patio y vi a la cerda grande el dueño siempre la tenia amarrada ella me veía y chillaba por que tenía hambre a lo cual yo le daba de comer aveces por que el señor salía a trabajar un día me quedo viendo a la cerda y noto su vagina algo hinchada y rosadita y se me paro la verga y en mi mente se me vinieron pensamientos ricos, pues un día aproveche que mi abuela y hermana salieron hacer un mandado y que el señor andaba trabajando y me quede solo con la cerda así que me la lleve atrás de la casa allí no nos verían por si ...

... acaso y empecé a tocarla a lo cual no le gustaba mucho y los lechones molestaban mucho así que les di de comer lejos de ella y empiezo de nuevo a tocarla y no se quería dejar a lo cual se me ocurrió darle de comer, al darle comida ella se quedó quieta dejo que le metiera los dedos seguidamente saliva la tenía muy espesa ya que estaba muy excitado después de un rato decidí meter mi verga por esa vagina rosita hinchada ella solo pujaba se movía mucho aun no le gustaba tanto eso se sintió rico esa vagina húmeda y calentita estaba rica después de un rato dándole acabé me costo mucho por que se movía pero se logró le deje la vagina llena de semen luego me dispuse a limpiarla para no dejar rastro, y así me la cogia cada vez que podía hasta que un día la cerda se me acerca de la nada me seguía para todas partes y yo pensé que era por que le daba de comer,pero no al ir atrás de la casa miro que ella me rosa l pierna y levanta la cola como ofreciendose a lo cual no me resistí y le metí la verga no lo podía creer la cerda disfrutaba que yo me la cogiera se ponía juguetona conmigo y eso me prendía a mil y así seguí varios meses hasta que el señor se fue de la casa y ya no se pudo más.