Relatos eróticos 12 Me vendí 3 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos 12 Me vendí 3

... para cacharte a tí, es qué también se cachen a tu marido.

Raquel : Perfecto Soli. Los espero. Me voy a esmerar para que me desee más.

El viernes por la tarde le dije a mi hermano el mujerón que se iba a comer y lo rico que lo hacía, pero aparte de dar una buena propina, pide una condición, que yo la cumpliré por ti, si no lo quieres cumplir.

Tom : Dime hermano, cuál es ésa condición.

Yo : El día que veas a la señora te lo digo.

Nos alistamos y bien perfumados con la bendición de mamá partimos.

Cuando nos abrieron la puerta la señora estaba bien linda, con su lencería negra resaltando su gran cuerpo blanco y por sus tacones se veía mucho más alta. Todo un mujerón.

El marido estaba con un polo pegado moderno y un short pequeño y todo depilado.

La señora nos recibió con un beso en la boca a los dos, que a mí hermano lo descolocó y Alan nos dió la mano.

Hicimos un brindis a vaso lleno y hablé 

Yo : Tom, qué te parece la señora ?

El no dejaba de mirar sus piernotas que sentada en la silla las resaltaba y más cuando las cruzaba.

Yo : Ahora te voy a decir claramente las cosas y si te desanimas nos vamos

La señora te ofrece su cuerpo para que lo disfrutes como quieras y por éso te dará una propina, pero la condición es que también tienes que cachar a su marido. Pero tú no te preocupes, que de él me encargaré yo. Estás de acuerdo hermano ?

Tom : Si hermano, pero si es necesario también lo puedo hacer con el señor.

Yo : Ok pero primero ...

... disfruta a la señora y después hablamos.

Hicimos un nuevo brindis y la señora iba adelante llevando de la mano a Tom y Alan me tenía también igual hasta llegar al dormitorio.

La señora se acercó a mi hermano y después de darle un beso profundo, comenzó a desnudarlo y acariciarlo hasta que al bajarle los pantalones saltó la gran verga de mi hermano.

Raquel : Dios mío, hijo qué tienes ahí ? No te duele cargarlo todo el día, por qué éso pesará 2;kilos.

Nos acercamos a verla y realmente era un vergon que yo ni sabía que tenía.

Alan : Ay Dios, a mí me mata...

La señora se agachó y la acarició con sus manos blancas y sus uñas rojas por todo el largo y todo el ancho hasta llegar a los huevos por media hora dejando la verga de Tom parada al máximo y Alan sin perdida de tiempo le tomó varias fotos aparte del vídeo que estaba grabando.

Luego ví que le pasaba la lengua por toda la verga y Alan hacía lo mismo conmigo. Media hora más en ése suplicio. Menos mal qué Tom se la corrió el miércoles, si no yá se hubiera vaciado.

Después ella se paró yéndo a la cama y poniéndose boca arriba le dijo.

Raquel : Ahora te toca a ti, saborear mi cuerpo, gózalo todo es tuyo. 

Yo desde la otra cama miraba a mi hermano desesperado por abarcar todo el cuerpo de la señora con sus lamidas, en especial sus piernas.

Mientras Alan seguía chupando mis huevos todo el tiempo que demoró mi hermano en hacer saltar a su mujer cuando le metía lengua en su culo y concha. Con las tetas no se ...