Primera vez con mi perro - Relatos Eróticos

Primera vez con mi perro

Hola me llamo Santa aunque de santa no tengo nada ya que me considero una mujer adicta al sexo y voy a compartir con ustedes la primera experiencia tuve con un perro

Mi esposo se encontraba de viaje y aunque apenas habían pasado tres días ya extrañaba su verga ansiaba coger y por un momento pensé en buscar a uno de mis antiguos amigos para sofocar el fuego que me estaba consumiendo y la solución llego de donde menos la esperaba, mire por la ventana que da al patio de la casa y ahí se encontraba el pastor alemán echado a la sombra con un buen trozo de su puntiaguda verga fuera de la funda y me sonreí a mi misma al imaginarme cogiendo con el perro y de primera instancia lo rechacé ya que eso nunca había formado parte de mis fantasías pero no podía apartar la mirada de la verga del perro ya que esta entraba y salía de su funda, yo inconscientemente comencé a pasar una mano por mi vulva primero sobre la tela del vestido y luego de plano la metí pasado un dedo suavemente en mi ya inflamado clítoris y ya no me pude contener

Con el perro dentro de casa este de inmediato llevo su hocico a mi vulva el olor de mis fluidos lo percibió de inmediato y se ponía de pie recargándose en mi cuerpo haciendo los típicos movimientos de un perro cogiendo ahí con grandes trabajos me desnude ya que el pero no me daba respiro ya desuda el perro continuaba insistiendo poniéndose de pie yo iba retrocediendo hasta que llegue al sofá y por el propio peso del animal quede sentada y este de ...

... inmediato trato de colocarse entre mis piernas y gustosa coopere separándolas

La verga del perro no encontraba su objetivo yo me encontraba abajo y su verga se deslizaba por encima de mi vulva así que levante la pelvis y al segundo intento la metió, el perro al sentir que la punta de su verga ya estaba dentro empujo con mucha fuerza clavándome hasta sus enormes bolas confieso que grite aunque apagadamente con su violenta ensartada, sus movimientos siempre violentos y rápidos me provocaron un orgasmo y luego llego su venida podía sentir como expulsaba potentes chorros de semen pero del placer pase al miedo cuando me doy cuenta que el perro no podía sacarme su verga, me había quedado pegada a él y yo para evitar el dolor que me estaba provocando al querer sacar su verga iba retrocediendo y no miento me arrastro por toda la sala

Por fortuna eso no duro mucho tiempo tal vez tres o cuatro minutos y el perro me soltó, mi error fue haber permanecido en cuatro patas meditando lo que por mi calentura había hecho y aun algo asustada por la arrastrada que me había dado y no cuento con el dato del tiempo que permanecí en esa posición cuando el perro ya repuesto de nueva cuenta me monto pero ahora estaba como perra y antes de que yo reaccionara el perro de nueva cuenta me ensarto

Ya con la verga del perro dentro me concentre en disfrutar cada uno de sus violentos embates y sintiendo sus enormes bolas haciendo presión dentro de mí y a pesar que el perro no dura más de cinco minutos ...