Se acabo mi mala suerte porque ya tengo macho permanente - Relatos Eróticos

Se acabo mi mala suerte porque ya tengo macho permanente

Tal parece que le mala fortuna me persigue porque envide siendo muy joven (24 años) dos años después me volví a casar ahora con un hombre maduro viudo también y con un hijo ya de dieciocho años el cual pierde la vida en un accidente de trabajo podía haberme ido con parte de su pensión y digo parte porque dejo estipulado en su testamento que la mitad seria para su hijo
Pero yendo al tema uno de tantos días desperté sumamente caliente y al encontrarme sola no tuve reparo en desnudarme para masturbarme libremente, me encontraba tan concentrada que no escuche la llegada de Toño mi hijastro me di cuenta cuando ya se encontraba desnudo y con la verga bien tiaza y a punto de meterse entre mis piernas, su inesperada llegada me dejo paralizada por un momento tiempo suficiente para que Toño se metiere entre mis piernas y pusiera su vega en la entrada de mi panocha al tiempo que me dijo, deja que te ayude para que descanses bien, yo aun no salía de mi asombro y di mi aprobación con un movimiento de cabeza
Sentí tan rico cuando Toño comenzó a meterme la verga que cerré los ojos y me entregue completamente, si mi deseo más grande en ese momento era tener una verga adentro no vi motivo para evitarlo, por encontrarme atravesada en la cama levanto mis piernas colocándolas sobre sus hombros y dio continuidad a la penetración ya con toda la verga adentro di ...

... inicio a mi cantaleta
Toño, Toñito eres un amor que rico me estas cogiendo cuando ya había iniciado los bombeos métela toda y dale fuerte que peguen tus bolas en mis nalgas, así Toño no importa que me saques hasta los ojos cuando empujaba con más vigor lo menciono porque la verga de Toño mide veintidós centímetros, con sus bombeos y me panocha llena con su verga tuve una serie de orgasmos creo que fueron cuatro
Toño se corrió adentro dejando mi panocha bien llena con su leche, no saco la verga de inmediato espero a que se fuera poniendo blanda y una vez que lo hizo me pregunto si ya estaba tranquila o quería mas 
Ahora estoy más inquieta ya probé tu verga y quiero más, pues no se hable más vamos a darle pero cambio la polisón colocándome a gatas, con sus manos en mis caderas le bastaron dos empujes para meterme toda la verga y es verdad que en cada postura todo es diferente porque así sentía la verga más grande y me estaba dando otro tipo de placer y de nuevo con mi cantaleta que no tiene caso que la repita lo que si les digo que también en esa postura tuve la misma cantidad de orgasmos y que nuevamente dejo toda su leche adentro de mi panocha 
Ya los dos estábamos bien prendidos y nos pasamos el día cogiendo, de ahí en adelante hemos continuado cogiendo pero con menor intensidad solo me mete la verga dos veces en la noche y no falta el mañanero