Los niños también saben coger - Relatos Eróticos

Los niños también saben coger

Viuda con 35 años y un hijo de catorce el cual tiene un amigo que en ese tiempo contaba con 16 años por alguna razón me obsesione porque él fuera el que me volviera a coger pero aun era un niño y temía por su reacción al proponérselo pero cuando ya tenía los 17 años me llene de valor y lo seduje y su reacción fue positiva al saber cuáles eran mis intenciones porque de inmediato comenzó a besarme con una lujuria incontrolable al tiempo que me quitaba la ropa y la suya 
Estuve a punto de saltar de gusto al ver el tamaño de su verga de veinticuatro centímetros seis más grande que la que me habían metido, imposible no darle una gran mamada lo que realice al instante por no ser de garganta profunda por mas esfuerzos que hice me resulto imposible tragármela toda 
Ya para meterme la verga me coloco al borde de la cama y flexiono las piernas  a la altura de mis enormes tetas con gran destreza y sutileza me fue metiendo la verga con una lentitud pasmosa que pienso que apenas tenía la mitad de la verga adentro que ya estaba sintiendo la llegada de un orgasmo y lo tuve pero no chorreado fue bien salpicado como si estuviera orinando que hasta pienso que puse ...

... los ojos en blanco porque mi vista se nublo a ese grandioso orgasmo lo precedieron otros cuatro mas mientras el bombeaba su corrida también fue grandiosa ya que por estarme cogiendo a pelo inundo mi panocha con su leche
Cuando decimos estar satisfechas en realidad estamos diciendo que deseamos mas y sin cambiar la posición de nuevo me metió su enorme verga, no sé si pujaba gemía bufaba o aullaba pero todo eso hacía con la verga del chico adentro los cuatro orgasmos que tuve fueron similares a los anteriores ojos en blanco y arrojando fluidos en torrentes por primera vez estaba teniendo ese tipo de orgasmos y su corrida fue de la misma naturaleza 
El chico me actualizo al decirme que la posición en la cual me había metido la verga se llama de mariposa y es donde la mujer más disfruta para mi fueron las dos cosas el tamaño de la verga y la postura pero como buen chico que es ya no hubo una tercera vez porque anochecía y tenía que estar en casa para no ser reprendido por sus padres 
Ahora el chico me visita cuando mi hijo no se encuentra en casa para darme tremendas metidas de verga que me dejan con las piernas temblando y en espera de su próxima visita