Una noche de agobiante calor me entregue a mi hijo - Relatos Eróticos

Una noche de agobiante calor me entregue a mi hijo

Soy originaria del sureste Mexicano donde la humedad aunada a las altas temperaturas hacen que algunos días y noches resultan asfixiantes y fue en una de esas noches que no podía conciliar el sueño a pesar que ya pasaba de media noche el calor era abrumador, mi hijo de 19 años a diferencia mía dormía plácidamente bueno eso pensé porque queriendo refrescarme pase a la sala vistiendo solamente mi minúscula tanga me movía en la sala cuando la voz de mi pequeño me sobresalto sus palabras fueron las siguientes al verme prácticamente desnuda
¿Qué tienes negra te hace falta macho? 
Cubrí mis pechos con un brazo y le dije no seas bobo es este calor el que no me deja dormir por eso vine aquí para tratar de refrescarme y con eso dio inicio lo que les estoy narrando
Negra hasta ahora pongo atención en tus chiches y veo que son enormes quita el brazo para que las vea bien
Estás loco le conteste 
Anda negra deja que las vea si ya los chupes mamando la leche bien puedo verlas 
No porque seguro vas a querer chuparlas otra vez, tal vez suene raro pero de verdad ya me encontraba caliente con el simple hecho de ver a mi retoño mamando mis chiches, de manera inconsciente retire el brazo y de inmediato mi bebe tomo una de mis chiches con las dos manos y la fue acariciando ya los pezones se encontraba inflamados  y no se detuvo de las caricias paso a chuparla y luego la otra yo bufaba de placer ...

... entregada por completo súper excitante y morboso me resulto ver a mi pequeño mamando mis chiches luego fue bajando una mano por mi cuerpo hasta llegar a mi panocha metiéndola por debajo de la tanga
Ya no hubo marcha atrás el me quería coger y yo anhelaba que lo hiciera   más bien lo necesitaba ya estaba por cumplir tres años sin coger y que mejor que fuera mi propio hijo quien me metiera la verga 
Bebe, bebe ya no soporto mas ya vamos a la recamara a coger ya grito porque me metas la verga y en misionero con las piernas flexionadas solo tuvo que empujar dos veces para meterme la verga entera ya me encontraba tan mojada que se deslizo sin dificultad alguna y de inmediato inicio los bombeos 
Yo resoplaba de placer sintiendo como su verga se movía dentro de mi ardiente panocha mi calentura era tan grande que no tarde en sacudirme con la llegada del primer orgasmo que tanto añoraba porque es el resultado de una buena metida de verga 
Me llegaron otros dos orgasmos y aun me estaba sacudiendo cuando metió su verga al fondo y ahí dejo su leche 
Con esa enorme metida de verga hasta del infernal calor me olvide y en esa noche me metió la verga en cuatro ocasiones dejándome completamente agotada por la gran cantidad de fluidos que expulse con mis orgasmos y ya pude conciliar el sueño
Me imagino que ya tienen idea de la vida que llevo al lado de mi retoño por eso no tiene caso que lo relate