Mi transformación de varón a hembra. Primera parte.
Fecha: 26/05/2025,
Categorías:
Transexuales
Tus Relatos
Autor: Karla, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... de ese día empecé a ir a casi todas sus reuniones y pensaba mucho en lo bien que se veían algunas “mujeres travestís y trans”, y empecé a observarlas y también a los hombres que las frecuentaban. Como a la cuarta reunión que fui, vi a un señor de edad madura, como de entre 40 y 45 años, que me llamo mucho la atención y se me hizo muy guapo y atractivo, me gustaba verlo (traía un traje café, pelo corto con canas en las sienes, era delgado, alto y usaba lentes) pero por pena no dije nada; sin embargo, desde que lo vi empecé a pensar mucho en el.
A las siguientes reuniones no fui porque pensé que si no lo veía ya no pensaría en él; sin embargo no fue así, al contrario, como no lo veía pensaba más en él, sobretodo después de que un día en el gimnasio vi a Gerardo con una playera que le quedaba entallada y se veía muy musculoso, tanto del cuerpo como de sus brazos, ese día se me hizo muy guapo, incluso soñé que sería lindo que me aprisionara con sus fuertes brazos, pero seguí pensando y ya más en aquel hombre. Y por esa razón le conté todo a Rosy, concluyendo que me atraían los hombres, que me gustaba ese señor y que solo pensaba en él, aunque me gustaba también Gerardo, por lo le pedí que me enseñara a vestirme, maquillarme y comportarme como mujer para acercarme a él.
Como consecuencia, Rosy me empezó a dar clases de como ser una mujer, con la finalidad de que pudiera caminar con tacones, sentarme, vestirme, maquillarme, platicar y comportarme como ...
... toda una mujer y me dio ropa que ya no usaba.
Para la siguiente reunión me vistió de mujer, me maquillo y me puso perfume, íbamos las 3, Rosy, la instructora y yo, llevaba puesto un vestido corto que me llegaba a media pierna, de likra en color negro, que me quedaba entallado, tacones altos, medias negras transparentes con rayita atrás, explantes, peluca, aretes, pulseras y collar, me maquillo y me puso perfume, en si, yo parecía una mujer. Me presentaban como su prima. Ese día no fue el hombre que me gustaba; sin embargo, platiqué con otras personas, hombres sobretodo. Y no obstante que no fue el hombre que buscaba, me sentía muy contenta, las miradas morbosas a mis piernas, a mis nalgas, a mis pechos (aunque fueran postizos), el aire en mis piernas, la atención que me brindaban, los besos en mis manos, en mis mejillas, los piropos tanto bonitos como subidos de color y ensi, todo eso me fascinaba. Por tanto, cuando nos retiramos les dije a Rosy y a mi instructora que quería ser mujer porque me había gustado todo y platicamos mucho sobre ese tema, concluyendo que me apoyarían en todo, pero que tenía que estar segura de lo que quería, por lo que me comentaron que viera al médico y que vistiera como mujer todo el tiempo y que si confirmaba mi seguridad en cambiar de sexo, hablara con mi familia y me sometiera a tratamiento de feminización. A partir de ese día todo el tiempo me vestí con ropa de mujer, así salía a todas partes y así me comportaba. Por lo que dos ...