Algo hermoso - Relatos Eróticos

Algo hermoso

Mis dedos entraban y salían de mi ano con fervor estaba echa una putita alzada,mojaba con saliva mis dedos y mi anito recibía ese masaje tan placentero,abría mi culito y mis dedos me daban con gusto uno dos tres dedos dentro mío,mi boca lanzaba alaridos de placer inigualables,sin duda alguna nesecitaba poronga esa noche,decidido a buscarla salí a dar una vuelta,me puse una tanga perdida en mi ojete que era un infierno arriba un pantalón  de gimnasia  yo estaba incendiado,camine por lugares conocidos en busca de acción,tal vez el día era martes no andaba mucha gente no me cruce con casi nadie,me senté en una plaza donde siempre pasaba algo pero esta ves no paso nada,en esa misma plaza a un par de metros ví a alguien acostado en las sombras tapado  con una manta estaba fresca la noche,mientras mas acomodaba la vista mejor veia al que estaba acostado en ese colchón de la calle,no pasaba nadie y el lugar estaba oscuro,veía como se movía por debajo de la manta,al seguir mirando note como esa personita ya sin disimulo me mostraba como se tocaba subiendo y bajando su mano por todo su pedazo,trague saliva me incorpore y me acerque a el,estaba oscuro me miró ...

... y una sonrisa se dibujaba en sus labios,mi vista estaba fija en aquel pedazon  de carne,mi lengua lamió mis labios y también sin ningún pudor me sente arriba de ese colchón sucio,mi mano tomo su preciosa pija y era mi mano la que subia y bajaba,el calor que salia de esa pija era increíble,estaba dura,me metí en el colchón y el me tapo con su manta,bajo mi pantalón y el calorcito de mi cola y la de su pija se fundieron,mi ano la recibió tragando toda su dureza,el metia y sacaba, sacaba y metía tomándome de la cintura, el placer de sentirla adentro era formidable,estaba siendo grachado en plena calle en una plaza en un colchón todo sucio pero no me importaba,mi colita estaba siendo feliz,después de unos minutos gloriosos sus huevos vacieron dentro mío toda su abundante cremita caliente,que mi ano se encargó de tomarla toda toda,el placer de haberlo recibido fue algo que me encantó,el se quedó dentro mío yo movia mi orto como queriendo más,me dio más sin sacarla mi amante callejero me regaló otro polvo,donde resistí sus idas y venidas fueron hermosas,después de ese segundo polvazo me levanté y me marche feliz ya estaba garchado por una pija desconocida.