Me enviaron para ayudar luego que lo operaron 3 - Relatos Eróticos

Me enviaron para ayudar luego que lo operaron 3

A mis 17 años me sentía ya todo un triunfador, tenía en mis manos todo el trasero de la señora Alicia, que se lo apretaba con mucho morbo y por momentos y mi dedo lo pasaba por toda la raya del culo haciéndola que soltara gemidos de lo excitadisima que estaba y luego mi mano la tenía en sus pechos le apretaba sus duros pezones de color café que los tenía empitonados.
Mi verga era atraído hacia su glúteos como si fuera un imán, pero fue ella quién lo agarró y lo llevó al medio de sus nalgas y buscando la entrada de su vagina, comenzó un movimiento de vaivén subiendo y bajando la piel del pene.

-! Ohhh..ohh. mm.. mm.. señoraa ¡

Y su vagina ardía y destilada almíbar caliente, mientras sus piernas ahora le temblaban y descubrí como llegó a un orgasmo femenino, la mujer de don Miguel chillaba como un animal se contorsionaba como malabarista y le vibraba la entrepierna. Así que en ese momento en que la tenía a la señora Alicia entregada le continúe sobándole las tetas con más fuerza y apunté mi verga a la entrada de su cueva que estaba muy dilatada muy mojada, fui penetrándole ya poco a poco cada centímetro de mi pene y  en un momento note una pequeña presión y un profundo ...

... gemido de la señora Alicia .

-! Ahhh. mm. mm.. sientoo como si me acabarás de desvirgarmee.ahh. ¡

Fue ella quién comenzó a mover sus nalgas era un mete y saca, que nos llevó a ambos a la gloria, ya la tenía bien sujeta de sus anchas caderas y le daba fuertes embestidas a toda su ardiente vagina haciendo que sus gemidos aumentarán de intensidad.

-! Ahh, ahh.. si métemela así así que ricoo.. ¡

Y la mujer de don Miguel gemia y se movía como si estuviera recibiendo una descarga eléctrica con todas las embestidas que recibía, lo saqué un instante y deslizaba entre sus labios vaginales. Y el roce de su piel con la mía era una sensación indescriptible  y la mujer de don Miguel se retorcía de placer mientras movía la caderas  en sintonia con mis embestidas y no pude resistirme y terminé dejándole toda mi eyaculación dentro de ella y fue un momento de extasis para los dos y ella volteó la cara y me dio un beso tierno en la mejilla. 

-! Cesar, nunca me habían hecho el amor así en mi vida, muchas gracias por ayudarme.. ¡

-! Señora Alicia cuando usted quiera puede llamar a mis padres y pedirle nuevamente mi ayuda, que siempre estaré acá para servirle en todo lo que quiera .. ¡