Primeras experiencias - Relatos Eróticos

Primeras experiencias

Tengo una cola prominente una cola que sobresale,una cola que que no me gustaba porque provocaba cosas en cualquier tipo sea compañero de la escuela en la calle,no hacía absolutamente nada para que sea pomposa,era natural ,las mujeres de mi familia eran todas culonas y yo salí también ojetudo,la escondía en pantalones anchos en realidad la odiaba,muchas veces en el colectivo había tipos que me apoyaban,me la han tocado más de una vez,yo no decía ni hacia nada,aveces apesar de no querer y negarme a mi mismo,en el fondo me gustaba sentir esos arrimones a ella o sentir sus manos que se perdían en la inmensidad de mis cachetes,a medida que entendía que mi cola no iba a desaparecer me empeze amigar con ella me sentia un hombrecito aunque también me sentía deseado por hombres era un lio mi cabeza, mis ideas,a la edad de trece y gracias a un primo lo hable con el,este me dijo que  que si sentía que me gustaban los hombres era normal,el tema era que me gustaban tanto hombres como mujeres, mi pija era normal había descubierto la paja y me mataba a ellas,y también descubrí que mi cola nesecitaba un poco de atención,mis pajas eran sublimes cuando al hacerlo metía mis dedos dentro de mi ano y gozaba el doble,el triple,muchas veces al acostarme era algo que no podía dejar de meterme los dedos en mi ano y gozar mucho,hasta ...

... acababa sin tocarme la pija ,con solo darme dedos acababa como un señorito, tuve mi primera relación con una vecinita que todos mis amigos pasaron por ella,fue lindo meter mi pija en su vagina,me gustó y pensé que mi sexualidad estaba decidida pero mi cola no pensaba lo mismo, aunque me pajeaba pensando en tetitas y conchitas mi ano pedia pija,no dudaba de que me gustaran las chicas pero despues me manoseaban o me la apoyaban y tambien deseaba eso,me propuse probar para decidir y fue un vecino yo tenía ya 15 años con un orto divino,que ya no lo escondia tanto,con el fue algo del destino donde el me propuso directamente coger así de una que quería mi cola,no lo dude mucho,nos encontramos en su casa una tarde donde nos desnudamos y le ofrecí mi orto,no podía creer el ojete que tenía,me hizo ponerme en cuatro en su cama y me lo comió todo metiendo su lengua en mi ano sacándome gemidos,metio sus dedos para despues meterme su pija,mi ano respondía a su cogida como si supiera como hacerlo,goce mucho el también,recibi su semen y me gustó tanto como cuando me cogi a mi compañerita,me despedí de el diciéndole que me había gustado y quedamos para otro día,en casa me sentía feliz mis pensamientos eran contradictorios,puse en la balanza que me habia gustado más y las dos cosas me habían gustado mucho,el coger y ser cogido.