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Relatos eróticos esposos cómplices cap 196
Fecha: 02/07/2025, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: Chacri, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Hola amigos mi nombre es Raúl y junto con mi esposa Bety les vamos a contar lo que tuvimos que hacer para seguir con nuestra empresa y no tener que liquidarla. Comenzaré diciéndoles que ésto se dió hace 5 años atrás, cuando ella tenía 45 años y aún conservaba su buena figura por ser asidua al gimnasio. Yo tenía 50 con algo de sobrepeso pero nada exagerado. Quiero empezar desde el momento que estuvimos en mi casa con mucha tristeza despidiendo a mis hijos que se iban al extranjero a probar suerte después de haberse titulado. Todo era lágrimas, recuerdos y buenos deseos de familiares y amigos mientras cargaban las maletas y al rato partimos en caravana al aeropuerto. Con mi esposa no podíamos contener la pena de separarnos por primera vez en nuestras vidas, hasta que vimos partir el avión dejando su estela, regresando a casa de la misma forma en qué vinimos al aeropuerto. En casa nos acompañaron dando sus muestras de amistad, hasta que de a pocos sólo nos quedamos los dos. Por tres días no hablamos ni comimos mucho, sólo mirando las fotos, sus cuartos y cualquier vestigio que nos recordaba a ellos. Tomando la iniciativa para vivir nuestra realidad le pedí a mi señora que me acompañe a seguir con los tramites de mi jubilación, prefiriendo ella quedarse a limpiar sus cuartos. Nuestra tristeza fue amenguada por nuestra preocupación para salir de las deudas que contrajimos para la titulación y todos los gastos del viaje y la estadía de nuestros hijos ...
... hasta que logren encontrar un buen trabajo. La casa sin los chicos era un desierto, pero yo no decía nada, más bien yo la sacaba al parque o a un cine para que se relaje. A los 3 meses salió mi jubilación yéndonos a comer a la calle para pensar bien que hacer con ése único y último dinero grande que tendríamos. Decidimos pagar todas nuestras deudas, en segundo lugar enviarles algo más de dinero a nuestros hijos y el restante lo guardamos hasta pensar qué hacer. Tuvimos propuestas de familiares para asociarnos pero con lo escuchado no aceptamos hasta que decidimos poner un negocio. Bety : Amor, si ponemos una bodega como la de mi hermana ? Yo : Amor, ése es un trabajo muy esclavizado y yá no estamos para éso. Le dimos muchas vueltas a muchos negocios pero yo mantenía mi idea de poner una empresa de venta de juegos de salón por ser más descansado, los artículos no expiraban y con un par de asistentes podríamos trabajar en un horario relajado. Al mes mi señora aceptó y para ampliar nuestro conocimiento fuimos a las fábricas de estos juegos para saber de los precios de compra y cuánto sería nuestra ganancia y otros asuntos colaterales. Estuvimos tan animados que después de varios meses le dí dos polvos a mi mujer que gozo lo mismo que yo. A los dos días salimos en el auto a buscar locales y después de una semana conseguimos uno amplio, seguro y en buena zona sólo que nos pedía un mes de garantía y seis meses de adelanto. Al siguiente día después de ...