Trans Missionera - Relatos Eróticos

Trans Missionera

... nalgas, pero sultitas en la parte de abajo, aparte porque en rio hace calor, (y si, tenemos que usar faldas largas) pero las faldas que uso son de telas frescas y delgaditas y sin fondo, ya hogla y Carolina todo tipo de faldas, y ellas si usan fondo debajo de las faldas para que no se les marquen las pantis, en mi caso no,  no me gusta porque acalora, y uso tanga o cacheteros, así que no se marca para nada, ellas porque no les gusta que las morboseen pero a mí si, me gusta mover las nalgas al caminar, contonearme, además que tenemos que salir a vender a las calles, es la forma en la que trabajamos aquí. 
Yo tengo dos rutas, nosotros vivimos en un barrio llamado Catumbi, cerca de una favela, (espero que sepan que es una favela) así que yo tomo la calle que se llama frei caneca y otro barriecito que se llama estacio, gracias a mis encantos tengo muchos clientes, mecanicos, vendedores de agua, puestos de gas, tiendas de tapicerías, de vidrios y la mayoría son hombres, a mí me encanta caminar entre todos ellos, sentir la tanga metida entre las nalgas, sentir la mirada de todos esos hombres viéndome al caminar, me siento como en una pasarela, algunos me tiran la onda, me hacen propuestas, algunas veces como termino rápido me quedo platicando con ellos, me platican de sus vidas, sus famiias, en fin, me hice muy amiga de ellos, y por esos encantos vendo muy rápido.
Casi siempre soy la primera y llegar a casa, así que descanso unos 10 minutos, para enfriarme y luego tomo un baño, ...

... créanme por lo menos Carolina y yo, al llegar siempre tomamos un baño y nos cambiamos la tanga, porque llega un poco sudada, por el caminar mucho, y porque rio de Janeiro es muy caliente, sé que hogla también hace lo mismo, porque las tres salimos de bañarnos y lo primero que hacemos es tender la tanga al sol. Luego comienzo hacer o adelantar la comida, para que cuando lleguen todos esté listo, para mi es tranquilo lo que hacemos, me gusta mucho cocinar, resalta mucho mi feminidad y mi papel cómo mujer, es todo un sueño para mi, después que comemos descansamos un rato, por ahí de las 4 de la tarde que el sol está más soportable, entonces salimos a viitar algunas personas, hablarles del amor de Dios, de la paz, o de lo que necesite la persona, para mí esto es nuevo tambien, pues solo estoy dando un año de servicio, nunca en mi vida había hecho esto... Aprendo siempre algo nuevo, la mayoría de personas que nos reciben en sus casas son viejitos, señoras, o personas enfermas, e algunos jovenes pero es pretexto para estar viéndonos a Carolina y a mi. 

Por las noches, las 3 cenamos algo ligero, ya hogla le prepara a su esposo algo más fuerte, pues seamos sinceros, los hombres sienten necesidad de comer más.
Al final del día, platicamos con Carolina en el cuarto, cosas del día, o Veces arregla mis uñas, yo las de ella, nos probamos ropa, ella duerme en un sort, tipo cachetero y blusita de tirantes, yo duermo solo en tanga y también blusita de tirantes, ya en el cuarto tenemos la ...