Mi hermana y yo, ahora somos novios
Fecha: 10/07/2025,
Categorías:
Incesto
Tus Relatos
Autor: JuanPa León, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Que onda banda, ahí Juanpa con otra historia buenísima de incesto.
Esta vez les contaré de como mi hermana y yo tenemos una relación amorosa oculta desde hace ya varios años.
Katherine (o Katy para la familia) es mi hermana mayor por 1 año, estuvimos juntos en primaria y secundaria, y aunque dejamos la prepa, pensamos en volver a estudiar. Al principio de todo, vivimos en la vecindad de siempre y compartíamos cuarto al no haber más espacio, pero aunque ya tengamos nueva casa, seguimos durmiendo juntos (por lo mismo, ya saben)
Ella es morena, delgada, alta y con buen culo y trasero, se hunde en el gimnasio todas las noches, y su cabello es liso, le llega hasta la cintura.
Desde muy chicos descubrimos los placeres del sexo, mi abuela nos bañaba juntos y aunque no pasaba nada, eso parece que alimento el deseo conforme crecimos.
Cuando descubrimos lo que es masturbarse, Kat no paraba de encontrarme a media paja en el baño y decirme entre risas si podía ayudarme.
Yo la encontré a ella un par de veces duchandose.
A ojos de la familia, Kat y yo somos muy unidos, pero hasta ahí, nada más.
Solamente mi prima Claudia y mi primo Esteban saben que somos novios, pero esa historia es aparte.
Kat y yo empezamos nuestra vida sexual luego de que después de bañarme, empezará a masturbarme un rato, Katherine llegó al cuarto y me vio tocandome completamente desnudo.
Enseguida me vio a los ojos:
- Juanpa, ¿Vas a seguir con lo mismo?
- ¿Que tiene? No seas chismosa
- ...
... Jajaja, ya te dije que podemos ayudarnos, pero te mamones mucho. Y dices que así quieres tener novia
Kat se quitó el top, se agachó y empezó a lamer mi pene. Lo introdujo en su boca y empezó a mamar con energía, yo me sentía nervioso de que alguien nos encontrará, pero Kat era tan obvia que el ruido podía oírse desde la cocina.
Unos 5 minutos adelante, Kat se quitó el short, hizo de lado su panti y se sentó en mi pene para introducirlo, su vagina era húmeda y estaba perfectamente depilada.
Seguimos con los sentones un buen rato, ella no paraba de gemir y pedir que le tocará los pezones.
Cerro la puerta con seguro, se desvistió y nos acostamos para coger como debe de ser.
Era un encuentro apasionante, como si fuéramos 2 amantes que ya nos conocíamos, pero solo éramos un par de hermanos completamente hormonales.
Kat continuo follando con fuerza y levantando sus piernas para penetrarla con comodidad.
Acto seguido, nos bajamos de la cama, se hincó y empezó a masturbarme, quería que me viniera en su cara.
- Así papi, dame lechita, quiero que me los eches en la cara, por fa.
Estaba aún más nervioso, era la primera vez que iba a venirme en alguien y se sentía cada vez más emocionante todo, y después de los nervios, un enorme chorro de esperma la alcanzó en la boca y sus mejillas, estaba riendo de ver cuánto semen salía de mi pene hacia su boca. Se ayudó con sus manos y lamió todo el semen restante, me chupo un poco más y nos recostamos desnudos.
- Eso estuvo muy ...