Adicta al sexo 2 - Relatos Eróticos

Adicta al sexo 2

Cuando escuché arrancar su carro trate de levantarme, me dolía todo, la vagina me palpitaba, sentí escurrir su semen, y estaba muy débil, me bañé de nuevo, cada vez que cerraba los ojos lo veía a él haciéndome suya, me costó admitir que a pesar de todo, sí, me había gustado, su verga era grande, cada embestida hacia que sintiera contracciones dolorosas y llenas de placer también, al mismo tiempo estaba confundida, me dormí, mi celular estaba apagado, finalmente cuando todos llegaron fingí que estaba enferma, pasaron unos días y tuve que ir a hacer un trámite a la escuela, él me llevó, después de días sin evitandolo, otra vez estábamos solos, manejo unos minutos y se paró en la nada, salió del coche y se fue directo a mí lado, abrió mi puerta y se avalanzo sobre mí, me besó con desesperación, yo correspondía, me apretaba las tetas, finalmente las descubrió y las lamió haciendo que yo gimiera cómo puta, después de unos minutos seguimos a la escuela, al salir el llamo a la casa y dijo que yo me quedaría en la escuela y que el después volvería, en lugar de eso me llevo a un motel fuera del pueblo, cuando entramos al cuarto fue cuando apenas comenzó a hablarme, -me tienes loco Susie, hoy te voy a consentir mamita, por portarte tan bien el otro día. Me quito la ropa, me dió  ropa muy sexy y tacones, yo quise complacerle, me agaché a darle una mamada, note que se corrió muy rápido, me acosté y dejé que me besara y lamiera por todos lados, parecía desesperado, pero la verga la seguía teniendo dura, entonces yo lo monte, brincaba en su deliciosa verga, gemía sin control, mis grandes pechos rebotaban y él estaba encantado, me cogió cómo quiso, los dos disfrutamos mucho, cuando menos acordamos era casi de noche