El hombre de su vida terminó siendo invitado para hacer trio. - Relatos Eróticos

El hombre de su vida terminó siendo invitado para hacer trio.

Les comparto mi experiencia que tuve en algo que comenzó  con  un juego.
sin saber que se podía hacer realidad.
Llevo ya tiempo de relación con una señora a la que llamaré Angélica, ella tiene cuarenta y dos años, tengo poquito más del año de relación con ella.
Es divorciada  y tiene dos hijos.
Yo me llamo Miguel tengo cuarenta y siete años, soy separado también tengo hijos. Total nadie es perfecto somos humanos.
Cuando conocí a Angélica buscamos rehacer nuestras vidas.
Pero todo ha girado en torno a pasarla bien los fines de semana.
En el sexo hemos sido creativos para no caer en la rutina. Ya no somos unos chamaquitos para andar en reventones y excesos.
Más bien preferimos disfrutar nuestros cuerpos cada que la libertad de fin de semana nos lo permite.
Ella tiene unas nalgas paradas y caderas anchas que es lo que más me fascina, porque cada que me la cojo de perrito me encanta ver entrar y salir mi verga de su panocha estando en esa posición.
Hemos llegado a fantasear con algunas cosas como espiar a alguien y también hemos jugado a que ella esta con otro, todo esto de común acuerdo y ha sido muy excitante.
Yo me excito como loco y termino dentro de ella y ella lo disfruta mucho.
Jugamos incluso usando nombres de gente que conocemos, Angélica también me permita usar nombres de algunas amigas cuando estoy entre sus piernas.
Todo cambió muy radicalmente cuando en una ocasión quedamos de vernos para nuestra acostumbrada sesión de sexo sabatina (los hijos se ...

... quedan con alguna hermana de ella y los míos los ve mi ex esposa).
Ese día iba un poco tarde debido a un imprevisto en mi trabajo.
Me apresuré a llegar a lugar de reunión que como siempre era habitual.
Al llegar vi a Angélica platicando con un tipo, como yo la conozco se notaba muy nerviosa.
Se puso más nerviosa cuando me vió llegar yo tranquilo la salude de beso delante del tipo, a lo que ella correspondió y no le ví ningún problema cuando me lo presentó.
Estuvimos platicando solo un momento y se despidió el tipo un poco apenado.
El susodicho se llamaba Daniel, uno de los nombres con los que fantaseamos Angelica y yo.
Entonces por eso entendí su nerviosismo...y tal vez se sentía algo apenada.
Esa tarde una vez que llegamos al motel, la sentí muy distinta.
Me chupaba la verga de una manera intensa jalaba aire hacía un ruido muy característico con boca y mi verga.
Mientras me la chupaba empecé a cuestionar el porque lo hacía de esa manera.
Por mi mente pasaban muchas cosas a lo que evidentemente sucedió hace unos momentos.
No pude más y mientras me la cogía de perrito se la solté :
¿ estas pensando en tu amigo Daniel verdad?
Como respuesta Angelica gimió profundamente y cada que le preguntaba su panocha me apretaba la verga.
Haciéndola llegar al orgasmo, terminó con toda la panocha escurriendo.
Descansamos un poco y duramos en silencio no se cuanto tiempo.
Le costó mucho trabajo hablar de eso, después de mucho insistir, por fin aceptó hablar.
Resulta que el tal ...