Me encanta ser azotada a la hora de coger - Relatos Eróticos

Me encanta ser azotada a la hora de coger

Desconocía mi afición por el masoquismo a pesar que disfruto cuando me azotan las nalgas y los pechos no soy una chica promiscua ya que soy muy selectiva para elegir con quien coger fue en una noche de antro cuando hice clic con un chavo de mi edad con el que minutos después ya estaba dentro de un hotel y entre besos y cachondeo nos quitamos la ropa, su verga la mire algo más grande de las que ya me habían metido ya sobre la cama empinada me metió la verga hasta el fondo recuerdo haberle dicho, hay cabron si la tienes grande por el dolor momentáneo que tuve pero que fue de mi agrado ya con toda la verga adentro llegaron los golpes en mis nalgas que en principio eran moderados me encontraba tan excitada que le pedía que golpeara mas fuerte con mis palabras le surgió lo violento y rudo, sus golpes en mis nalgas sonaban como tambores de guerra en ese momento sin pedirle nada adicional entendió bien lo que deseaba porque me tomo del cabello para levantarme y luego azotarme en la cama parecía muñeco de trapo con ese tratamiento alcance un grado de excitación enorme hasta que llego el momento en que tuve un enorme orgasmo en ese momento me dio la vuelta para cogerme en ...

... misionero ya con su verga adentro comenzó a golpear mis enormes pechos  pasado un tiempo puso una mano en mi cuello y lo fue apretando yo sentía que me ahogaba pero lo estaba disfrutando apretó tanto que perdí el conocimiento por un leve momento cada golpe en mis pechos los disfrutaba como si fueran caricias ya con los pecho morados de tantos golpes se detuvo para golpear mis mejillas ahí los golpes fueron sutiles para no dejar marcas, parece mentira pero entre más me golpeaba mas quería estaba alucinada teniendo una serie de orgasmos encadenados para mí en ese momento el dolor era placer puro cuando el chico sintió que estaba a punto de correrse se quito el condón y metió la verga en mi boca dejo salir la leche con tanta fuerza que las gotas llegaban hasta mi garganta
Sus  primera palabras fue preguntarme si ya estaba satisfecha o quería más me hubiera encantado que me diera otra metida de verga pero ya con el cuerpo frio y magullado por todos lados le dije que por el momento eso era todo
Paso casi un mes para que desaparecieran las marcas de sus golpes en mi cuerpo pero no descarto la posibilidad de realizar otra sección masoquista con los golpes he tenido los mejores orgasmos