Incubo ( Parte 3 ) - Relatos Eróticos

Incubo ( Parte 3 )

... gentil, Gaby fue girada, quedando con la almohada en sus nalgas, lo que hacía que el monte de venus se elevara y el ente le separo las piernas a ella, cuando su sexo se abrió por la separación de sus muslos, observe con claridad lo mojada que se hallaba, al igual que un movimiento masturbatorio empezó nuevamente en su vulva, el clítoris era movido de una manera franca, los brazos de Gaby, cuando fue girada quedaron en su estómago, y después de un rato de masturbación, algo le tomo los brazos y se los subió a la cabecera separándoselos, pareciera que estaba amarrada a las cuatro patas de la cama, cada miembro a cada pata, los pechos se movían también, eran manoseados, los pezones de movían como cuando los jalan; fe entonces cuando los labios vaginales sumamente mojados, empezaron a moverse también, separándose levemente, como cuando un dedo se desliza entre ellos, del clítoris al ano y de regreso, mi hermana jadeaba, su respiración era muy acelerada y sus labios vaginales se empezaron a abrir más, acerque el zoom al máximo y pude observar su himen, y algo lo estaba empujando hacia a dentro, después de varias compresiones leves, sucedió, el himen fue rasgado y leves gotitas de sangre salieron, y la cavidad vaginal fue abierta, el ente estaba ...

... completamente recostado en ella y empezó a galopar, primero levemente, pero después de un buen tiempo el movimiento se incrementó, y Gaby arqueaba su cadera para que aquello entrara más, así hasta que llego nuevamente en un orgasmo intenso, aquello no salió inmediatamente de la vagina de ella, duro bastante tiempo, luego la vagina se cerró y el ente desapareció, Gaby estaba muy dormida para ese momento. Por fin había sido violada por aquel amigo-novio imaginario. Esto se repitió nuevamente a la noche siguiente, Gaby ya no usaba ropa para dormir, en cuanto se retiraba a dormir, se encerraba y se desnudaba completamente, luego se acostaba así. No pasaba mucho tiempo cuando ya estaba en franca actividad sexual. La actitud de Gabriela también empezó a cambiar, se diría que se empezó a volver mas desvergonzada, perdió la pena y el sentido del pudor, los ratos por la tarde andaba por la casa solo con su playera y sin nada abajo, estoy seguir que mi mama ya se había dado cuenta de eso pero por alguna razón no le estaba diciendo nada, ningún regaño, ninguna llamada de atención. Algo que me llamo mucho la atención fue que empezaba a frecuentar mucho mas tiempo la mesa de piedra que esta en el centro del jardín, al igual que Eva, algo las atraía a ese lugar de la casa…