1. Pueblo chico, morbo grande - Capitulo 1


    Fecha: 18/01/2019, Categorías: Gays Autor: marcossanrafael26, Fuente: SexoSinTabues

    ... necesario ese momento donde su carne hiciera contacto con lo profundo del culo de Hernán. Al sentir que la presión en sus dedos ya no era la inicial y que los gemidos logrados eran de puro placer, retiro estos dedos y tomando el mazo del mortero de cristal cuya punta era suave y más estrecha que el otro extremo que machacaba, vertió más aceite en el mango y comenzó a empujar hacia adentro de esa hasta entonces, virginal cola, conforme el instrumento ganaba centímetros adentro de Hernán, Esteban podía observar por el mango transparente como ese ano ganaba dimensiones. Al oír el primer gemido de dolor, Esteban salió del momentáneo trance de esa visión, dándose cuenta que ya solo quedaban poco menos de 5 centímetros afuera, del mazo cristalino tomado con la punta de sus dedos que dejaron de empujar, percatándose que sin saberlo el chico de primaria tenía más de 20 centímetros clavados y del grosor de una verga medianamente ancha y recién se quejaba, preocupado por un instante el mayor de los primos pregunto. –estas bien? -Dame un segundito para acostumbrarme, si estoy bien. – Dijo Hernán jadeando por sentir esa parte de su cuerpo llena, cuando no sabía que estaba vacía antes. Momentos después, al escuchar una respiración más relajada, Esteban retiro con calma el mazo y lo dejo a un lado. Entendiendo que ya había logrado el cometido de dilatación con creces, se pajeo un poco con la mano aceitosa y apunto al anito semiestrenado. -Queres que siga? – Preguntó casi más por retórica ...
    ... que por pedir permiso, ya que no sabía si podría parar llegado ese momento. - Si, cojeme primo Al empujar, el glande tuvo algo de resistencia hasta encontrar el ángulo más que nada, cuando entro toda la cabeza Hernán gimió levemente, pero esto no detuvo ni un instante la entrada lenta pero constante del falo, al llegar a la parte media de esa verga, se escuchó un suspiro, comprensible si se entiende que la pija de Esteban al medio ya casi tenía el diámetro de la base, que es de casi 5 centímetros. Sin contemplación el adolescente siguió sin chistar hasta que sintió sus huevos tocar las nalguitas de chico. -Ahora báncatela un poquito primito porque te va a doler. -Pero si ya me entro to… - Yantes de poder terminar la frase Esteban le tapó la boca con la mano y comenzó a meterla y sacarla a su gusto, rápido sin ser una carrera, pero provocando el característico sonido de pelotas palmeando un culo, además de gritos ensordecidos del menor que en poco tiempo ya estaba dejando rodar una lagrima mientras gemía de dolor. Las pajas casi diarias de Esteban hicieron que aguantara el placer sublime que sentía en ese momento, no era solo la sensación física la responsable de ese lívido prendidísimo, sino también el morbo perverso de mirar ese frágil cuerpo preadolescente, delgado y lampiño indefenso ante su mástil de carne venosa que reclamaba la inocencia del hasta entonces primito Hernán que, conforme pasaron un par de minutos ya tenía unos ojitos de vicio inconfundibles detrás de esa ...
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