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Maribel mi amiga del squirt
Fecha: 24/01/2019, Categorías: Gays Autor: mrwilson, Fuente: CuentoRelatos
Cierto día por Facebook conocí a Maribel, una ama de casa de 30 años, trigueña, estatura media y un poco gordita; empezamos a escribirnos y luego a llamarnos, siempre planeábamos la forma de vernos para tener una tarde de sexo ocasional, pero surgían varas cosas que lo impedían. Pasaron varios meses, ambos perdimos contacto y ella no volvió a actualizar nada en su Facebook; sin embargo un día apareció de nuevo publicando muchas fotos, se había operado, se hizo la lipectomía y ahora tiene un cuerpo escultural, abdomen plano, cintura de avispa, tetas sobresalientes y un culo que ahora se le nota mucho más; era obvio que ahora me llamaba más la atención, cada vez que podía revisaba sus fotos, una cada vez más llamativa que la otra, con vestidos y shorts súper sensuales. Nuevamente empezamos a tener contacto, me comentaba cosas que le pasaban, cosas que quería, y que además necesitaba empleo para poder suplir sus gastos. Precisamente me di cuenta de unas vacantes de empleo en la empresa donde yo laboraba en aquel tiempo, le pedí su hoja de vida y la envíe a mi compañera de recursos humanos o contratación, esa misma semana recibí una llamada de Maribel con la grata noticia de que la llamaron para presentar pruebas y entrevista; lo cual me alegró mucho, más aún de que por fin iba a verla frente a frente. Llegó el día en que ella fue a la empresa a presentar las pruebas de ingreso; estuvo toda la mañana junto a otras chicas, ella me escribió por WhatsApp diciendo que me ...
... acercara donde ella para saludarla, que quería verme, y así fue en cierto momento me acerqué donde ella estaba y la saludé, estaba demasiado sensual, con su cabello suelto negro largo, un jean súper ajustado, blusa corta con un escote algo llamativo y tacones negros. Me dio un abrazo y me dijo al oído que quería agradecerme el favor por haberla recomendado para el empleo, a lo cual le dije que a medio día la invitaba a almorzar. A mediodía, efectivamente nos encontramos, solo pedimos un jugo, ella muy sensual empezó a tocar mis pies con su píe a lo cual le propuse que fuéramos a otro lugar más privado y ella sin objeción aceptó, era necesario aprovechar el tiempo, solo tengo dos horas de almuerzo. Fuimos a un motel a las afueras de la ciudad, la verdad era la primera vez que iba a tener sexo con una mujer operada; por mi mente pasaban tantas cosas, el tiempo es oro y en ese momento empezamos a besarnos apasionadamente, su boca sabía al jugo de fresa; besé su cuello; de antemano quedamos en no arañones ni moretones. Sin embargo nos besamos apasionadamente, ambos aun de píe, quité su pantalón y sus nalgas quedaron al descubierto, tenía unas diminutas tangas azul celeste, luego quité su blusa y sus brasieres; empecé a chupar sus senos, y morder sus pezones despacio, ella quitó la correa de mi pantalón y bajó la cremallera, desesperadamente agarró mi verga y la empezó a masturbar, ella subió un píe a la cama y de esa forma me agaché para besar su concha por un lado de su ...