1. Sexo en los probadores de caballeros


    Fecha: 28/01/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: zorro_en_celo, Fuente: CuentoRelatos

    ... necesitaba.
    
    Yo le dije a Michelle cual era mi talla de americana y de pantalones y ella me los escogió, preguntó a uno de los vendedores y le dio dos tipos de trajes que según ella me convenían, negro y gris marengo. Cogió ambos y ella me llevó de la mano a los probadores. Allí me desnudó y al ver que yo llevaba tanga se empezó a poner cachonda y me pegó un lingual morreo, mientras nos besábamos con lujuria, me magreaba el rabo y me hacía daño y eso me ponía más cachondo y vicioso. Yo estaba de pie y abierto de patas y ella me mordisqueaba el tanga y eso hacía que aumentase mi lujuria y mi sexual cachondez, lamia y lamia y yo me aguantaba la ganas de gemir y eso aumentaba más mi morbo, luego me di la vuelta y comenzó a comerme el ojete y lamérmelo y eso me ponía más cachondo, ella se chupó un dedo, se lo ensalivó bien y me volvió a dar la vuelta y retiro la telita del tanga para comenzar una maravillosa comida de rabo. Ella estaba de rodillas frente a mi rabo y mientras me comía el rabo, con el dedo me petaba el ojete que iba entrando su dedo lenta y lujuriosamente y me ponía la polla más curva y dura.
    
    Su follada dedal me excitaba y yo estaba en un paroxismo total, en un casi orgasmo, ella tragaba y tragaba mi verga y me mordía las pelotas hasta hacerme daño y eso me ponía más burro y más libidinoso, pero al estar en aquel lugar me tuve que aguantar. Ella dejó de comerme el rabo, ya que teníamos más tiempo y me quedé empalmado. Ese fue el primer "round" de lo que me ...
    ... esperaba, me probé los dos trajes, me quedé con el negro y nos marchamos de allí. Yo salí con un terrible "empalme" sexual, que amenazaba con salir de mi pantalón y Michelle iba riendo y divertida al ver lo que me pasaba. Nos dirigimos a una camisería de caballeros que había tres locales más allá y ella me eligió como anteriormente había hecho, una camisa color sangría, nos volvimos a meter en el probador y seguimos con lo empezado, me volvió a desnudar mientras me decía lo bueno que estaba, lo cachonda y salida que estaba ella, así como las más irreverentes y obscenas guarradas depravadas producto de la libidinosa cachondez que ella llevaba. Se volvió a poner de rodillas frente a mí y volvió a repetir la operación de antes. Yo follaba, fornicaba y jodía su boca y sentía en la punta de mi cipote la campanilla de su boca y ella se la metía hasta casi dar arcadas de no poder respirar. Yo estaba más atónito que antes y me maravillaba de la mamada que me estaba haciendo, pero esta vez sin su dedo en mi ojete. Me probé la camisa, la pagué y nos fuimos. Después de aquello, ya me volvió a pasar lo de antes, salí más salido, caliente y lascivo, pues la muy guarra no terminó en ningún sitio.
    
    Después de esto yo ya no esperaba nada de esta zorra madura y me llevó al piso de arriba y paseamos. Había por allí una sex-shop y allí nos metimos. Yo ya estaba más encendido y ella me llevó a una zona donde había tangas de hombre. Nos volvimos a meter en el probador. Por tercera vez, me volvió a ...