Mi mejor amigo a la salida de la escuela, me decía. “Nos vemos en el río.” yo sabía que en el rio me iba a dar sabrosamente por el culo, en el río.
Fecha: 06/09/2025,
Categorías:
Dominación / BDSM
Gays
Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30
... a él, ofreciéndole mis nalgas, no lo pensó ni por un segundo. De inmediato agarró su ya parada verga, y la dirigió directo a mi culo, apenas la cabeza de su verga, tocó mi esfínter, solté un profundo e intenso gemido, por lo que de inmediato él entendió, que a yo no me iba a molestar, que él siguiera empujándome toda su verga, a través de mi culo. Lo que ya sin poder detenerse, comenzó hacer, casi de inmediato comencé a chillar de dolor, pero en lugar de sacármela y retirarse, lo que le provocó, fue seguir enterrándomela. Así que a medida que su verga me fue penetrando, de estar nuevamente llorando, y chillando por el dolor, que su verga me producía, a medida que me la seguía enterrando por mi apretado culito. Pidiéndole que me la sacara, comencé a mover rítmicamente mis nalgas, dejando de gritar, sádicamente, mi amigo seguía empujando toda su verga contra mi culo, a medida que yo, ya no lloraba, ni gritaba de dolor, sino que, todo lo contrario, gemía y chillaba profundamente de placer. Mi amigo estaba tan excitado, que hasta le provocó morder mi cuello, y pasar su lengua por mis orejas, a medida que comencé a decirle, con voz afeminada, una y otra vez. “Dame más duro papi”. Él no podía creer que me estuviera comiendo el culo, a mí su mejor amigo, pero ...
... eso no impidió que me apretase con más fuerza contra su cuerpo, hasta que, al rato, finalmente se vino, por completo dentro de mí. Al separarnos los dos nos quedamos tendidos sobre la arena de la orilla, mi cabeza me daba vueltas, cuando de momento sin pensarlo, lo que me provocó fue ponerme a mamar su verga, cosa que al igual que darme por el culo, para mi amigo eran la primera vez que le sucedía. El sentir mi cálida, y húmeda boca, chupando, y mamando toda su verga, era algo completamente nuevo para mi amigo, y más placer le produje, cuando al momento de venirse, yo continué chupa que chupa, tragándome toda su leche. Ya nuevamente tirados sobre la arena, le rogué que no se lo contara a nadie, que, si él lo deseaba, yo le daría el culo, y mamaría su verga, las veces que él quisiera, pero que por lo que él más quisiera, no se lo contase a ninguno de nuestros compañeros de clase. Ya desde ese momento en adelante, seguimos viéndonos en un retirado recodo rio, donde él me besaba y me trataba como si yo fuera su novia, y les diré que en ocasiones me dejaba que hasta le chupase las bolas. Cosa que yo hacía con mucho placer, como el que me produce cuando actualmente me penetra, me deja mamar su verga, o voluntariamente me pasa su lengua por mi apretado culito.