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Mis vacaciones laborales (2)
Fecha: 09/10/2025, Categorías: Infidelidad Autor: SaulOsorio, Fuente: CuentoRelatos
... teléfono. Yo: ¿Diga? Julio: Tienes una suerte… Estaba a punto de no llamar otra vez. Yo: ¿Dónde estás? Te desapareciste. Julio: Estoy camino al departamento de Sergio, en el octavo piso. Yo: Ya voy. Me dirigí al octavo piso, donde solo había dos departamentos, distintos al resto. Había un enorme buffet y mucha gente. Entre la multitud empecé a buscarlos. Pregunté por Sergio, pero algunos parecían no conocerlo. Seguí insistiendo. Joven: ¿Sergio? ¿El dueño? ¿Un güey alto, castaño y que no deja de sonreír? Yo: Sí, ese mismo – aunque me pareció graciosa la descripción, fue precisa -. ¿Lo conoces? Joven: Claro, ¡el cariñosito! -el apodo generó risas en su grupo-. Está por acá con su güera, más al fondo creo. Yo: Es bastante grande este piso, será un reto encontrarlo. Joven: Precisamente para la ocasión ¿no? Jajaja. Tranquilo, yo voy a buscarlo. Yo: Jajaja es cierto, hay que aprovechar el momento en un lugar como este. Una chica del grupo intervino. Chica: Estoy casi segura que no lo hizo – entre risas – Sírvete, Joaquín va a buscarlos. Yo: Gracias, muero de hambre… Soy Saúl, un gusto. ¿También estuvieron en la piscina? Mariela: Yo soy Mariela, ya conociste a Joaquín y él es Alberto – señalando al otro joven -. Y no, llegamos tarde. Estuvimos algo ocupados en la mañana, pero llegamos para las competencias. Me lo decía con un tono juguetón, bastante extraño. No tenían más de veinte años y se insinuaban así. Yo: Ah bueno. Jaja, ...
... provecho… ¿Qué tal estuvo ahí arriba? Mariela: Divertido como siempre. Competencias, shots… te lo perdiste. Alberto: El vóley estuvo muy hot. Mariela: ¡Los cariñosos! Jajaja, era todo un show. Yo: ¿Te refieres a Sergio? Mariela: Con su güera, sí. Cada vez que ganaban un punto, la levantaba como un premio… Alberto: ¡Y qué levantadas! Mariela: Con ese trasero tú hubieras hecho peores cosas, güey. Yo: Pero es natural en una competencia… no es cuestión de cariño. Alberto: Es que cariñosos anduvieron después de ganar. En ese momento regresó Joaquín. Joaquín: ¿Qué onda con esos güeyes? – dijo al volver solo. Alberto: ¡¿Los encontraste?! ¡Espero no los hayas interrumpido! Joaquín: No había nadie ya, parece que se fueron, pero me consta que estuvieron acá. ¡El cuarto está hecho un desastre! -todos rieron-. Yo: Bueno, ni modo. Gracias muchachos. Joaquín: Búscalo en su departamento. Yo: ¿No es este el departamento de Sergio? Joaquín: No, está en el piso seis. ¡Era verdad! Recordé que el mismo Sergio lo mencionó la noche anterior. Qué estúpido de mi parte. Salí enseguida, dejando el plato a medias, y bajé al sexto piso. La puerta estaba abierta. Entré y los encontré conversando en la cocina. Todo bien… salvo que Pamela cortó en seco la charla al verme, haciéndole notar mi llegada a Julio. Ambos me miraron en silencio durante unos segundos. Yo: Hola amor… también te extrañé – no me vio en todo el día y ni me saludaba. Pamela: ...