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Encontré a mi compañera de trabajo practicándole sexo oral
Fecha: 11/10/2025, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Fue hace aproximadamente un par de meses. Me encontraba un día normal en mi trabajo, en el cual, en ese entonces, una chica a quien llamaré [MD] atendía en una pequeña recepción. En ese tiempo, muy poca gente pasaba por ahí (cabe aclarar de inicio que yo no tuve mucho contacto con [MD] ni me interesé en conocerla, por lo cual nuestra relación era la típica de saludarse y despedirse). No solía pasar mucho por esa oficina, pero aquel día me dirigí hacia donde estaba para preguntarle unas cosas relacionadas con el trabajo. En mi camino vi que un chico, a quien llamaré [HD], se dirigía a toda prisa hacía la oficina de [MD]. Yo iba a un paso más lento, así que intuí hacia donde se dirigía él. Hice una pausa de aproximadamente dos minutos porque me entretuve a saludandar a un compañero. Cuando finalmente llegué a la oficina de [MD], noté que no estaba. Supuse que había ido al baño, asi que decidí esperar unos cinco minutos. Al ver que no volvía, decidí pasar a un pequeño almacén que está justo al lado de su oficina, ya que también necesitaba unas cosas de ahí. Intenté abrir la puerta, pero estaba cerrada con seguro. (Otra cosa a aclarar: la puerta del pequeño almacén permanece abierta mientras [MD] está en la recepción, ya que ella es quien autoriza el acceso. En este caso, solo ella tiene las llaves para abrirla, pero justo ese día yo también llevaba mis propias llaves). Bueno, total, toqué la puerta por si acaso, y entonces escuché ruidos adentro. En unos 20 segundos me abrieron ...
... la puerta y, en efecto, era [MD], pero no estaba sola, estaba con [HD]. Quiero suponer que estaban charlando, pero no le di mucha importancia. Tomé lo que necesitaba y me retire. Recuerdo que les dije: «Sigan divirtiêndose». Creí que al verme ellos también se irían, pero para mi sorpresa, [MD] volvió a cerrar la puerta. Me quedé un rato afuera revisando algo en mi celular y, de repente, escuché que le puso seguro a la puerta de nuevo, lo que hizo crecer mis sospechas. Estuve parado afuera unos tres minutos, intentando escuchar algo para confirmar mis suposiciones. Mi curiosidad fue tanta que me pregunté: «¿Qué tanto hacen detrás de esa puerta?». Los ruidos dentro del almacén se hacían más evidentes, asi que me armé de valor y decidí abrir la puerta para despejar mis dudas. Y si, ahí estaba [MD], en cuclillas, con las piernas abiertas, practicándole sexo oral a [HD]quién estaba parado, recargado en un estante, el cual era lo que hacía ruido. El tenía los pantalones hasta las rodillas y, al parecer, la estaba grabando con su celular. Tenian las luces apagadas, pero pude verlos gracias a la luz natural que entraba por una pequeña ventana. Cuando me vieron, intentaron taparse y ocultarse de inmediato, pero a mi solo me dio gracia más allá del morbo. Cerré la puerta y me fui, esta vez definitivamente. Más tarde, vi cómo [HD] regresaba apenado a su área de trabajo (cabe mencionar que ellos trabajaban en áreas diferentes). Debo admitir que la situación me excitó un poco, por lo que ...