Me cogí a la nalgona de seguridad 2 - Relatos Eróticos

Me cogí a la nalgona de seguridad 2

Empezó quitándose la chamarra y el suéter. Traía una blusa rosa muy X y un pantalón de mezclilla claro ajustado (bueno, no ajustado pero tenía buena pierna y trasero así que supongo que así se le veían todos jajaja).

En cuanto vi su pantalón «ajustado», la neta me prendí y me acerqué a ella. La abracé y comencé a besarle el cuello para prenderla porque con todo pues también quería que ella se prendiera y disfrutara… Y obviamente el abrazo sirvió para bajar mis manos y POR FIN! agarrar y apretar esas deliciosas nalgotas que tanto tiempo se me habían antojado… Se las apretaba y estrujaba… Se sentían tan ricas , aproveché para darle un par de nalgadas, también subí mis manos para tocar sus pechos…

Después de un poco de faje ya quería ver qué traía abajo, así que intenté desabrochar su pantalón pero no pude y ella me ayudó y finalmente comenzó a bajárselo… Qué traería puesto para adornar ese culote? Una rica tanguita? Un cachetero de encaje? Un calzoncito sexy? , la verdad es que moría por ver qué traía… Ojalá fuera tanga para hacérsela de lado y cogérmela así……

Considerable fue mi decepción cuando al bajarse el pantalón vi que traía una especie de short-licra negra para nada sexy

Se desamarró los zapatos para poder quitarse el pantalón y yo aún esperaba que a lo mejor debajo de esa licra trajera algo más, así que en cuanto se hubo quitado el pantalón y se puso de pie, nuevamente me acerqué a ella para volver a tocarle sus nalgotas y explorar con mis manos lo que ...

... había debajo … Y nada, no traía nada debajo, sólo esa licra … En fin, qué se le iba a hacer

Procedí a bajar su licra y agarrarle sus nalgotas así sin nada y la verdad es que estaba encantado, se las apretaba y la nalgueba… Ufff… Sonaba riquísimo cuando mi mano chocaba con su piel…

Le quité su blusa y no dejaba y mientras no dejaba de manosearla y nalguerla, jajaja.

Finalmente decidí que había llegado la hora. La senté en la cama y procedí a quitarne el pantalón y el boxer. Me acerqué a ella y le desabroché el brasier (rosa) para poder acariciar sus pechos… Estaban bastante bien a pesar de ya haber tenido dos hijos debo añadir.

Se los acaricié y jugué un poco con sus pezones y procedí a quitarne la playera, con lo que ya estábamos completamente desnudos.

La recosté en la cama, mojé un poco mi pene, me puse sibre ella y comencé a penetrarla mientras aprovechaba para besar y chupar sus senos…

Empecé a bombearla y mientras, ella como que se animó y me acariciaba los hombros y la espalda… la verdad es que se sentía muy bien. Continúe dándole en variaciones del misionero y me gustaba cómo se veían sus pechos, rebotando con cada metida, además del clásico sonido de «plas! Plas!» al chocar mi pelvis contra la suya… También me gustaba cómo subían y bajaban sus piernas y cómo se veían sus patitas con sus calcetas rosas con cada metida jajaja.

Después de estar así unos minutos decidí que ya era hora de disfrutar de ese culo tan ansiado , así que sin más, me salí de ella ...