1. Además me arregló el aire acondicionado


    Fecha: 22/12/2025, Categorías: Confesiones Autor: Araguasch, Fuente: CuentoRelatos

    ... más esto y sin pensarlo mucho, sentí como lo hacía.
    
    Mi gruta estaba de mis jugos propios y el sudor sufriendo una inundación de humedad y el ruido de nuestras carnes y el sudor fue como un canto de fieras haciendo su labor de procreación, y al poco mi orgasmo se unió al de él y nos volvió a la realidad de la belleza del sexo, quedamos exhaustos y entonces él me dijo “creo que en lugar de arreglar el calor te he metido más calor en el cuerpo, voy a arreglar el aparato frigorífico descansa que pronto acabo, no te muevas”.
    
    Y de un salto tal como estaba desnudo como Apolo, tomó el camino de la cocina y le oí manipular con sus herramientas mientras yo empapada de sudor seguí en la cama, esperando que aquello no tuviera fin y deseando que la reparación fuera un rápido trabajo y volviera a mí, pero no pude resistir el ir de nuevo al baño y ponerme bajo la ducha a intentar refrescar aquel horno que era mi cuerpo, mientras oía que me decía: “¡ya termino te voy a poner toda la casa fresquita!”.
    
    Me sequé y me tiré de un salto en la cama cuando comencé a sentir las oleadas de aire fresco, que llegaban ya del frigorífico, mientras él gritaba desde la cocina: “Ya está, ¿sientes el fresquito? No te muevas que pronto voy a terminar mi trabajo”. Tan pronto oí esas palabras comencé a humedecerme de nuevo, tomé un frasco que siempre está en mi mesa de noche y aproveché para ponerme en determinadas partes de mi cuerpo y a esparcir por el ambiente desde mi cama, me hubiese gustado ...
    ... gritarle, que viniese rápido
    
    Pero no quise acelerar nada, y esperar aun unos minutos que me parecieron eternos, pero ya el ambiente se iba refrescando y cada vez era más agradable estar allí tendida en la cama con las piernas bien abiertas.
    
    Apareció de nuevo un Apolo y ya tenía su palo como un vengador duro como el mástil de una bandera y se acostó a mi lado y comenzó a besarme con suavidad, primero los labios, la cara, mis orejitas, mi hombro y llegó a mis senos hambrientos de caricias y nuevamente erectos mis pezones y los fue alternado en chuparlos como un bebe hambriento mientras su mano, me abrió mi coñito con dos dedos y otro de la misma mano, me acariciaba mi clítoris, en suaves círculos alrededor, que me volvían frenética y mi culo se levantaba pidiendo que me penetrara, pero su idea era otra.
    
    Esta vez no tenía prisa, era yo la que tenía prisa, mi ansiedad aumentaba por segundo y tan pronto note que sus labios se acercaban a mi coñito y lo besaban no pude aguantar más y un enorme orgasmo sacudió todo mi cuerpo, haciendo temblar toda, pero el siguió y ahora note que era su lengua la que recorría mis labios interiores y pasaba por mi clic, fue hundiendo su cara en mi cosita mientras su culete subía hasta mi cara y subiendo una pierna colocó ante mí su mástil en una muda invitación a que lo chupara, no lo dude y comencé a chupar aquel delicioso trozo de carne dura y palpitante, mientras sentía que el aumentaba sus movimientos de lengua en mi interior y con ambas manos ...