Aprendiendo a ser sumisa (V) Examen sorpresa - Relatos Eróticos

Aprendiendo a ser sumisa (V) Examen sorpresa

... el dolor se convirtiera en placer y comenzara a gemir como una perra, todos tomaron turno para romperme el culo mientras que me penetraban dos me hacía chupar su verga y otros dos me hacían masturbarlos, esa escena era muy excitante para mi coño no dejaba de chorrear.

-esta zorra pide a gritos que le destrocemos el coño.

Asentí con la cabeza sin dejar de chupar

-creo que la cerdita quiere hablar.

Saco su verga de mi boca y dije dejándome llevar por mi placer.

-¡¡¡Hooo!!! ¡¡¡Siii!!! Denme por todos mis agujeros quiero sentirme llena por sus vergas.

-vamos chicos hay que darle gusto a la perrita.

Uno de ellos se sentó en el sofá y me dijo que me sentara arriba, así lo ice me senté metiendo lentamente su verga en mi coño cuando la tuve completa adentro sentí como comenzaron a meterme otra verga por el culo, para ese punto gemía como toda una perra en celo y para ahogar mis gemidos otro de ellos metió su verga en mi boca, mientras que masturbaba a col otros dos uno con cada mano, estuvimos así por mucho tiempo, hasta que de pronto sentí una gran descarga de semen en mi culo, coño y boca y unos segundos después mi cara también. Me hicieron limpiar sus vergas y todo el semen que se había caído en la alfombra con mi lengua. Cuando termine el maestro Sebastián dijo.

-valiste hasta el último centavo zorrita anda ve a preparar algo para comer.

Sin decir una sola palabra me dirigí a la cocina, ellos se quedaron viendo la pelea de box en televisión, tenía ...

... muchísima hambre pero no me atreví a comer nada sabía que tenía que esperar a que ellos comieran primero, serví y se los lleve, adopte la posición de sumisión hasta que terminaron cuando lo hicieron uno de ellos se levantó saco un plato de perro y vació las sobras de todos las cuales eran cartílagos de la carne ya masticados junto con un sobre de comida para perros lo puso frente a mí y dijo

-anda perrita come.

Mire el plato con desagrado mi amo nunca me había dado comida para perro y menos sus sobras

-¿no vas a comer puta?

Intente dar un bocado pero mi estómago se revolvió al tocar un poco con mi legua me aparte enseguida, esto molesto mucho a Sebastián así que me levanto de los cabellos diciendo

-¡te sientes muy fina para no tragar lo que te doy he ahora lo que te vas a comer es peor!

Me sentó en el sillón se bajó el pantalón y puso su culo muy cerca de mi cara

-me vas a dar una buena limpiada de ojete estúpida cerda anda mete tu lengua y saca toda la mierda.

No quería hacerlo pero sabía que no tenía opción yo me lo había buscado y temía que le digieran a mi amo que no había sido obediente así que con lágrimas en los ojos comencé a chupar su culo metía la lengua hasta donde alcanzaba, quería vomitar pero si lo hacía seguro me harían comer mi vomito

-muy bien puta ya está limpio, ¿Quien sigue muchachos?

Así que uno por uno fui chupándole el culo, cuando por fin termine me tiraron al piso y me dijeron que dejara limpio el plato y luego de lo que había ...