Mi primera vez (como a un niño le gustan los homb - Relatos Eróticos

Mi primera vez (como a un niño le gustan los homb

Mi primera vez con un hombre

En mi primer relato les conté como lo pasaba terminando mis 14 años, rozándome con amigos y como sentía los penes chicos y gordos cerca de mi ano. Ya casi a los 15 empecé a sentir un pene de verdad. Aquí si rompieron mi virginidad y sentí que no fue violento ni brusco. Fue muy pausado y placentero luego de la primera vez.

Como les había contado ya había recibido algunas invitaciones de amigos a sus casa a jugar en las camas como amigos y uno un particular me llevo a su casa, el tenía 16 años y tenia juegos electrónicos, (flipper), muy audaces para la época. Y fue embaucándome en la idea de jugar solo yo. Mientras el todos los días iba abrazándome por atrás y punteándome con su pene bien erecto. Este muchacho era Pablo, un chico robusto y de buena familia pero muy caliente, me chupaba el potito y las nalgas y de a poco iba acercándose mas a mis anito virgen.

Un día el me tenia en su cama solo con una polerita y sin nada para abajo y me propone ponerme un calzón de su hermana menor y un vestido de niña. Lo que no me molesto porque así me sentía yo. Y me tendía sobre la cama con calzones de niña y me hablaba como a una mujer. En una de esas oportunidades entra el papá en escena y nos pilla conversando y yo vestido de niña con los calzones hasta las rodillas y con el potito a su disposición. El papá solo atino a reírse de la situación y dijo que nos fuéramos a jugar con los otros chicos más normalmente.

Aquí es donde me detengo y empiezo a ...

... fijar la historia con detalles y con lujos. El papá de Pablo, era Don Carlos, un señor de 46 años muy normal con una cara de señor correcto y muy simpático. Tenía un guatita muy simpática y siempre era genial con los chicos, pero desde ese día el nunca más dejó de mirarme en forma igual. Es mas le insinuó a Pablo que yo fuera mas seguido a jugar a la casa con sus juegos electrónicos (flipper) y cada vez que llegaba le pedía a Pablo que fuera a comprar algunas golosinas para compartir conmigo.

Así fue como dos meses, todos los días y llegando el verano las cosas tomarían otro destino. Don Carlos envía de vacaciones a la ciudad de Valparaíso a Pablo, dejándome con todas las ganas de seguir jugando. Un dia de Diciembre me encuentro a Don Carlos y le pregunto por Pablo y me dice que apenas el día anterior se fue a Valparaíso a veranear por dos meses. Y volvería terminando Febrero. Y ahí le dije, que pena Don Carlos yo quería jugar en su juego pero ya que no esta Pablo, esperare. Y ahí Don Carlos me dice pero anda igualmente, el jueguito esta a tu disposición. Le di las gracias.

Un día Sábado, aun lo recuerdo muy bien, luego del almuerzo voy a la casa de Don Carlos, y me hace pasar a su casa. Fueron días especiales donde me trato muy bien y fue haciendo lo que hacia su hijo, abrazarme por atrás como modo de cariño. Modo que de un día para otro empezó a cambiar por caricias y roces. El era un tipo grande moreno velludo, como oso. Y sentía su gran pene en mis nalguitas.

Un ...