UN TRIO CURIOSO - Relatos Eróticos

UN TRIO CURIOSO

El vestido ya lo tenia hecho un revuelto de tela sobre su cuerpo, cuando apareció un hombre entre la oscuridad, en un instante apareció de entre los arboles que al verlo ya estaba apenas a unos metros de nosotros mirando, paré mirando pero mi esposa se puso de pie en el suelo su espalda pegada a mi, me cogió la polla se fue inclinando sin importarle que estaban mirandola y se la fue metiendo, que placer empecé a follarla y ocurrió, mi esposa parecía otra mujer, gemia jadeaba como nunca, le excitaba aquello, el tipo se acerco hasta quedar a un par de metros, ahora vi su mano meneandose una pija pequeña sin dejar de mirar yo aun desconfiado pero incapaz de dejar de follar a mi esposa pues esta no paraba de gritar, hasta que se corrío, aquello no le importó se dio la vuelta y ante él se puso a comerse mi polla de nuevo, hasta de nuevo levantarse y esta vez sentarse ella sobre el coche, tocandose descarada su mojado coño y tirando de mi polla, apenas se la metí ya la tenia de nuevo gritando, justo en ese momento el tipo se corrío, yo estaba follandola excitado sin dejar de mirar al tipo, mi esposa que era lo qe mas me ponia no dejaba de gritar de moverse como le era posible, hasta que de nuevo se corrio a gritos, ya no pude más me corrí. Apenas me quite de mi esposa esta se fue rapido al coche, como avergonzada, él tipo seguia alli en ningun momento parecio peligroso, saqué el pantalon del coche los zapatos mi esposa dentro, todo a la luz de la luna solo, mientras me vestia ...

... fuera el tipo se acercó, vi que era mayor, me separe algo del coche, cuando empezo a hablarme muy bajo, lo que me pedía era que si veniamos mucho por allí, le dejaramos mirar, era lo que le gustaba, solo mirar, queria darme su numero de movil dudé, pero al final cogí el movil del coche mi esposa seguia a oscuras dentro que no se la viera, lo grabé en un principio mas por no ser borde con él que por otra cosa, nos marchamos. Nos llevamos unos dias follando en casa mi esposa y yo como leones, como hacia años no lo haciamos cada vez que el niño estaba fuera de casa, hasta que unos dias despues me puse en contacto con él, mi esposa quería repetir, esa segunda vez, fuimos aun mas lanzados sobretodo ella, se ponia mucho que la viera chupandome la polla bien cerca, que viera como era follada por mi, mi esposa gritaba y gritaba, que decidimos para la siguiente buscar un lugar que fuera bien solitario, así empezó esta rara amistad, como empecé a chatear con él mi esposa no lo hacia, para ella era como usarlo solo para aquello, a la vez, habia abierto entre mi esposa y yo un camino nuevo. Era y es casado, tenia 53 años, muy poco dotado, con una mujer de 47 años, a la cual le habia pedido, probar otras cosas de las que ella no queria ni hablar, sabia sus gustos pues era incapaz de follarla, solo le iba mirar y masturbarse, así fue pasando el tiempo, los meses, a la vez montandonoslo mas salvaje ante él nosotros, mi esposa eso de que la viera, es que perdia la cabeza, a la vez él le habia ...